Bar de toda la vida. En dueño, Rafa, es un encanto. Ponen unas tapas generosas con las cañas. Personalmente me gustan mucho las bravas y un guiso de carne que ponen de tapita. Si pasas por el barrio tienes que ir.
Lara R.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Bar de cabecera. Caña-casi-doble a 2,70 €, con cada consumición tapa doble y tiene terraza. En verano se llena la terraza todos los días pero dentro tiene taburetes y mesas altas(ojo que el olor a veces con el que sales es de bar de toda la vida)
Cristina B.
Rating des Ortes: 3 Madrid
Típica tasca o bar de tapas. De estos en los que te tratan fenomenal, son majos y además te tratan superbien. Como si fueses de la casa con amabilidad y atención. El local no es una maravilla en espacio ni en diseño pero cumple para lo que es, ¿qué necesitas para tomarte unas tapas con unos amigos? Unas sillas y una mesa y cuanto más apretados mejor. Pues eso es lo que tienes. También tienen terraza para los fumadores y para los que gusten de ver la calle, incluso tienen unas mesas altas a la vera del local, para estar cómodamente apoyado y atechado mientras disfrutas de tu cerveza. Decir que la cerveza de caña es Alhambra y siempre te preguntan en qué tipo de vaso la quieres, detalle que se agradece enormente, en mi caso que soy de dobles y que me encanta en copa, es un detallazo que me lo pregunten. Respecto a las tapas que te incluyen con la bebida depende de la época del año, la útlima vez, hacía un frío que pelaba y nos dieron un vaso de caldo y nos pusieron una cazuelita con judías blancas con chorizo(o fabas con chorizo como decimos en mi tierra) que me sentaron fenomenal. Y siempre te ponen una tapa(fría o caliente) para acompañar la bebida. Sales comido o cenado de allí por 6 €. Una maravilla.
Diego M.
Rating des Ortes: 5 Madrid
Creo que nunca he conocido tantos bares como en mi época universitaria. Si tuviera que hacer una lista, sin lugar a duda el Quirico estaría en las parte alta de la clasificación. He estado en muchísimas ocasiones: para merendar, cenar, tomar unas cañas antes de una noche de marcha o al salir de clase y de la academia… El Quirico siempre esta ahí. Con cada caña te ponen una tapa muy abundante y variada. He vivido muy buenos momentos allí y todos a un precio más que razonable. El tan temido momento de la cuenta se convierte en este local en un mero trámite o en instante de sorpresa, sales bien comido y bebido por una cantidad casi irrisoria. Ahora han aumentado el establecimiento, antes era mucho más pequeño, pero mantienen las tapas y los precios. Además, uno de sus camareros, Hermes, es de lo más simpático que me he econtrado por Madrid. El sí que sabe cómo tratar a los clientes. Cuando llega el buen tiempo ponen terraza, aunque si quieres disfrutar de las tapas que acompañan a la caña, mejor quédate dentro.