De todas las tiendas«bazar chino organizado» como las llamo yo, es la que menos me llama la atención. Aunque desde fuera parece que tiene mucho, al entrar, y será por la amplitud del local, te desilusiona un poco. La mayoría de los artículos son cosas de decoración; pero más que decoración de buen gusto, son como de broma, como para regalar, usar un rato y desechar, y aunque algunas de las cosas son curiosas, y quizás llegara a hacerme con ellas, el precio echa mucho para atrás. El recorrido en la tienda se hace en forma de U, esta vez sin demasiado zigzagueo, a diferencia de otras del estilo.