Bueno pues, hacia muchos años que no venía a este restaurante ya que normalmente suelo ir a uno que hay en la zona que me encanta. Se que lo habían cerrado y por lo visto según me ha dicho uno de los camareros lo reabrieron a finales del noviembre pasado. La última vez que vine a comer al otro sitio ví que estaba en obras y eso nos ha motivado a acercarnos y probar. El sitio como siempre, eso no puede cambiar pues esta dentro del parque natural del Montseny, es maravilloso. En las instalaciones del restaurante encontramos mucha zona para que jueguen los niños, con bancos, un pequeño picadero y tres caballos. Aunque lo más divertido es un perrito que hay por el restaurante con unos ojos espectaculares que hace las delicias de todos esperando que le lances una piña que te trae raudo y veloz y te deja de nuevo en los pies. Otra cosa que han hecho es ampliar la masia con una gemela pero moderna que para mi gusto rompe un poco con el entorno y cuyo interior es muy frío, el único punto de calidez es una gran chimenea encendida, pero las paredes y techos completamente blancos y con lámparas modernas hacen para mi gusto que pierda el encanto que podría darle un color más cálido. Han querido hacer una zona chill out en el exterior que esta muy bien para tomarte una copa o un café si el tiempo lo permite y que en verano dará mucho juego. También pude ver que había un letrero que marcaba habitaciones así que supongo que el ampliar haciendo esta nueva casa es por ese motivo. En cuanto al restaurante, no puedo decir que haya salido plenamente satisfecha, cuando hemos entrado no se nos han acercado ninguno de los 4 empleados que estaban por allí a pesar de que tres de ellos estaban en la barra sin hacer nada y me habían visto, hasta que no me he acercado yo hasta la barra, cruzando medio restaurante, no me han venido a preguntar. Cuando nos han acomodado en la mesa, nos ha comentado el encargado que enseguida vendrían a tomarnos nota y explicarnos los dos menús que tienen, pero ha ido pasando el tiempo y no venia nadie. Cuando por fin se ha acercado un camarero, lo ha hecho para tomarnos nota sin traernos antes la carta con el menú lo que me demuestra cierta descordinación y ante mi queja de que llevábamos mucho rato y que era difícil saber que tomar cuando todavía no nos habían traído la carta con los menus, se ha ofendido un poco y me ha contestado no muy bien. Por no levantarnos e irnos hemos mirado la carta y nos hemos decantado por el menú de calçots. El menú de 18 € consta de ensalada, tejas de calçots ilimitadas, una butifarra con una patata al caliu y un postre. Café y bebida a parte. La ensalada, aunque estaba muy buena era escasa para dos, mas bien era una ensalada individual de manera que bajo mi punto de vista falta la otra ensalada, vamos que se ahorran una con lo de compartir. Los calçots están muy bien hechos y la salsa esta muy buena y es abundante, eso si! El pan tostado un poco justito también ya que los trozos eran pequeños, en este caso un trocito pequeño más habría estado bien. El segundo estuvo muy bien en cuanto a sabor, una buena butifarra y una patata muy sabrosa también. El alioli, rico pero de nuevo escaso para dos, para que os hagáis una idea era como un baso de cortado medio lleno. Aquí eché en falta lo que se entiende por un menú de calçots y es la parrillada de carne, con lo típico, un trazo de pollo, Cordero, la butifarra, etc, pero como te avisan que es una butifarra sólo pues si quieres el menú bien y sino pues te coges el otro. Por ultimo tenemos el postre, aquí no pregunte porque das por echo que es una crema catalana, tal vez por la costumbre de que es lo típico en este menú así que la sorpresa vino con un cortecito de helado y una cuchara sopera para comértelo, esto nos divirtió un rato, la verdad! En definitiva, cuando años atrás fui no tuve la mejor de mis experiencias por la atención y en esta ocasión y después de una reapertura mi gozo en un pozo ya que la cosa no ha mejorado mucho, un menú de 18 € sin bebida y con un menú de calçots al que le faltan unos cuantos detalles me parece caro, poca carne, poca ensalada y por lo menos informar del postre ya que la idea siempre es otra cuando conoces estos menús. Debo decir que al final el trato de los camareros ha sido un poco mejor pero no puedo darle más de dos estrellas a pesar que iba predispuesta a que se llevase 4.