Mi amigo Félix es fiel del Divino y de su dueña, Pepa. Él fue quien me llevó por primera vez a este pequeño bar de La Alameda, en el que celebró su cuarenta cumpleaños. Rectifico, es pequeño pero no tanto, porque aquel día éramos más de veinte cantándole el cumpleaños feliz y escuchando sus palabras emocionadas. Una de las cosas que más me gustan de este bar es la caipiriña, tanto de cachaza como de ron miel. Ese veranito, esos hombros al aire y esa terracita en la esquina, justo al lado del Badulaque. La terraza del Divino disfruta el codiciado tesoro del sol ¡no todas lo tienen! La carta es muy apañá, con sus carnes mechás y su salsa de castañas que quitan el sentío, al menos el mío. En los meses de frescor Pepa, la dueña, suele cocinar algún guiso los fines de semana.
Guillermo P.
Rating des Ortes: 4 Sevilla
No sé que tiene este lugar para gustarme tanto, la verdad es que es un bar bastante pequeño, aunque eso sí con una terraza muy apañá. Los botellines de cerveza tiene un buen precio y los montaditos están exquisitos, yo recomiendo especialmente el de crema de castañas y queso de cabra, sencillamente delicioso. Tienen un tamaño perfecto para acompañar la cerveza y siempre vienen con patatas fritas incluidas. La Alameda siempre está muy transitada pero siempre que he ido a esta terraza he encontrado sitio para sentarme, relajarme y ver pasar la tarde entre caña y caña. El trato personal es bastante bueno y el lugar inmejorable. Tiene sombrillas para protegerte del sol cuando este es insoportable y a pesar de estar en la plaza está bastante protegido, con lo que no es no hace demasiado frío aunque sople algo de ventisca. Es el lugar ideal para encontrarse con todo el mundo porque está en un sitio de paso, en uno de los rincones de la Alameda, siempre que estoy allí suelo encontrarme con alguien. En definitiva es un sitio en el que es muy fácil sentarse y muy difícil levantarse, se está muy a gusto.
Desiree R.
Rating des Ortes: 4 Sevilla
Hay un pequeño lugar en una esquina de la Alameda en el que te sentirás como en casa. Es muy pequeñito pero tiene una terraza estupenda que podrás disfrutar casi todos los días del año(incluso si no llueve mucho las sombrillas te hacen de paraguas). Tienen una estupenda selección de vinos y hacen el mejor tinto de verano que he probado, el cual sirven además en un vaso ancho. Tienes desde montaditos hasta ensaladas, y en invierno, los fines de semana, la dueña hace unos potajes«que quitan el sentio», los cuales te sirve con la cervecita a un precio más que razonable. Tampoco dejes de probar el salmorejo de remolacha, el cual se convertirá en uno de tus platos favoritos para el verano. Y por último, y no menos importante, los camareros son un encanto, Pepa la dueña, Fabio, Toñi, Loli… Lo dicho, como en casa.