Si buscas, como dicen ellos en su letrero, comida tradicional andaluza… Sí pero no. No suelo ver por aquí pucheros o potajes de esos clásicos de abuela. El cuchareo y los bares nunca han estado bien relacionados. Por lo que, corrigiendo, si vas buscando comida tradicional andaluza de bar… este puede que sea uno de tus sitios. Y en ellos, me es difícil encontrar algo que salga del«Normal — OK» que rezan las tres estrellas, vaya por delante. No me gusta que el serranito no tenga tomate, desde incorporarlo es un must en toda regla y no hacerlo, pecado. Pero bueno. La ensaladilla estaba bastante apetecible(aunque no soy nada entendido en ese mundo de mayonesa) y los caracoles, ahora que es el tiempo, bastante buenos. Otro plato de la carta es el chipirón a la plancha, donde no es fácil equivocarse, o el pescaito frito. El bar había tenido una ubicación sustancialmente mejor años atrás, pero se ve que ha arrastrado a buena parte de la clientela a un espacio interior no demasiado amplio con unos veladores invasivos de la acera y el carril bici se mire por donde se mire. Aun así, ya se sabe, por tu barrio y estando en buena compañía, no se pide más.
Ruben V.
Rating des Ortes: 5 Sevilla
La verdad que el Omaita ha estado presente en mi vida desde siempre, desde el primer bar que se abrió en el lateral de la plaza de la Romería, hasta su última ubicación no he dejado de acudir allí a probar su solomillo al whisky con las mejores patatas fritas«empapuchadas» con esa salsa que he privado nunca. Del resto de su cocina, pues más que aceptable, en especial los serranitos y los polacos, sobre todo con los precios que tienen, sumamente económicos que hacen de este bar, si estás por la zona del parque Amate, sea un sitio perfecto para tomar algo al sol. Y con respecto al ambiente y trato, pues es simplemente inmejorable
Manuel Ángel R.
Rating des Ortes: 5 Sevilla
Situado en un barrio periférico de Sevilla, el nuevo omaita nos ofrece la típica comida andaluza de la mejor manera posible. Un trato al cliente exquisito y muy buen ambiente siempre, además de la comida, han hecho que el omaita sea famoso en la zona por sus platos. En su emplazamiento actual ningún bar ha llegado a cuajar. Anteriormente estaba a una manzana pero el dueño del local decidió abrir su negocio y se tuvieron que marchar. O eso dicen. Aún así, sigue abierto y al 100% de ocupación casi siempre. Entre sus platos estrella esta el mantecado. Un mollete de los buenos con solomillo al whisky y patatas fritas dentro que te recuerdan a la madre que parió al cocinero pues no hay cosa igual en el mundo de buena. Es muy grande y llena, pero solo por gula me comería todas las existencias. Las lagrimas de pollo así como las croquetas también son de categoría. La gente no deja de pedirlos. La primavera sevillana es de caracoles y a los caracoles de este bar los han llegado a comparar con los del mismísimo tremendo como un año le pillen el punto, se puede asegurar que vas a tener los mejores caracoles de Sevilla en la periferia. En cuanto a precios esta bien, ni caro ni barato. Bien Muy recomendable