Panadería de barrio justo delante del mercado de feria la iglesia de Omnium Sanctorum. Muy buena selección de pastelería ‘basta’ tipo cuñas, palmeras y donuts para los que tengáis antojo de azúcar después de un día largó de curro o sesión de spinning XD
Paco P.
Rating des Ortes: 4 Sevilla
No puedo evitar cada vez que compró el pan, comprar una litrona fresca, me sale solo. Igual que: ponme un jameson con 7up o café y entera de aceite y jamón, aunque intente decir otra cosa, me sale, no lo puedo evitar. En esta panadería he comprado mas litros que pan, todo sea dicho, por la proximidad al mercado de la calle Feria, lugar en el que pasamos habitualmente largos ratos de medio día indiferentemente del día, sale más barato sentarte en la placita de detrás del mercao. Nos suele gustar mucho el jaleillo que se monta en esa zona. Las panaderas son majísimas y están ojo al dato de todo lo que pasa en el barrio, tiene un cuaderno de bitácora mental en el que tienen todo interiorizado. Mi amigo Flaco es supercolega de ellas, siempre se enrolla hablando de lo mala que está la cosa. Hace poco nos fuimos a por una litrona y a pillar una bolsa de regañás para acompañar el cartucho de chicharrones que habíamos comprado en el mercao, al verlo nos dijeron: «No compréis más en ese puesto que ese tío es un cabrón». Dicho y hecho, si algo les había ofendido a ellas, indirectamente nos habían ofendido a nosotros. Ahora, el flaco no está, cuando voy por allí, me preguntan por él. Yo, con mis chicharrones del otro puesto, voy a por la litrona y la regañá mientras les digo: «No se preocupen, que él está de lujo».
Cristina B.
Rating des Ortes: 3 Sevilla
El Horno San Bruno es uno de los hornos que mejor han sabido aprovechar los encargos de dulces de fiestas, como las torrijas, los pestiños o el roscón de Reyes. Mi familia encarga en este horno el Roscón de Reyes desde que lo conocimos, una tarde que mi madre necesitaba comprar pan y pudo encontrar esta tienda con pan recién hecho en mitad de la tarde. El pan estaba bien caliente y jugoso así que aldía siguiente se pasó a por una milhojas y a por unas magdalenas, sí eso que ahora muchos llaman muffins. ¡Qué daño ha hecho el Starbucks al mundo de las pasteleria y las cafeterías! El olor del pan, de los pasteles y la manera de colocar en el mostrador los huevos Kinder hace de este local normalito todo un lujazo pasarse cada vez que una tiene mono de dulce. Se compra algo artesanal, baratito y sin las mismas guarrerías que tiene la bolleria industrial y tan pancha que se queda… Bueno, ya queda menos para el Roscón de Reyes de este año. Hace por lo menos que no me toca el regalo sorpresa de dentro. A ver si este año es el mío. ¡Ah! y puedes comprarlos solos, con nata o con chocolate.
CARMEN M.
Rating des Ortes: 4 Sevilla
Aquí el pan sale tan crujiente y calentito que te debates entre meterte en el horno para que te den una pasadita a 120 grados o arrojarte sobre el pan del expositor y devorarlo sin consentimiento alguno. Conocí este establecimiento a fuerza de pasar por la puerta y producto del tedio que me produce comprar pan insípido del supermercado. El olor al pasar además despertó mi sentido del olfato y entré convencida de que me llevaría media tienda. Lógico tratándose de grandes artesanos del pan. Jose Jesús estaba todavía estudiando bachiller cuando su padre le dijo que le echara una mano. Desde entonces se ve que le echó todo el cuerpo porque lleva ya la tienda en pie más de 50 años. Además a este negocio se une otro que tienen del mismo estilo en la zona de Santa Catalina. Pero volvamos al riquísimo pan, porque aquí tienen tantas clases que no sabes cuál elegir. Primero le pides dos barras, luego una más, después otra y antes de salir te planteas que mejor compras cinco. Ese es el problema: que te lo llevarías todo, incluso a la dependienta que es bastante agradable. Por supuesto, además del pan común, pero elaborado con manos artesanales, tienen pan integral, con semillas, sin sal y el sin fin de tipología que puede tener este producto básico. Igualmente en la tienda puedes encontrar otros productos, algunos de repostería, pero he de reconocer que yo solo tengo ojos para mis seductoras barras. Y es que ligar con una baguette tiene su gracia y más cuando se deja comprar tan fácilmente. Tú prueba y luego me cuentas. Lo mismo nos encontramos allí cualquier día tirándole los tejos al mismo bollo.