Spala II

We came here for the churros and chocolate, and they were delicious! The chocolate is a bit too sweet for my liking, and the churro was a bit airy. But, in general, quite good. I had great churros in Granada where the chocolate was a lot thicker and darker, but this was acceptable. Worth a try, especially if you’re visiting the Metropol Parasol, as it’s right in front of it!

El grupo Spala es todo un clásico en nuestra ciudad. Hay que reconocer que a este local en concreto le dieron un buen lavado de cara hace no muchos años y el resultado fue más que correcto.
Tienen un mostrador donde venden chacinas y quesos. El interior es enorme, con una barra muy grande también y un pequeño salón con varias mesas donde comer sentado. Eso sí, lo mejor del local es su terraza y como comenta Beatriz V., su ubicación.
Nunca he comido, ni tapeado aquí. Sólo lo he usado para tomar un café, o un refrigerio rápido, y no en muchas ocasiones. Así que no puedo valorar este aspecto, aunque he de reconocer que nunca me ha atraído comer en este establecimiento.
El motivo de las dos estrellas es que al igual que comentan todos los compañeros, el personal presta una atención horrenda. Supongo que debe ser porque la política de Recursos Humanos de la empresa debe ser nefasta y los empleados no estén a gusto. No me puedo creer que únicamente recluten a las personas más desagradables de Sevilla.
Habiendo como hay por la zona tanta oferta, mejor pasar de largo.
Buon Appetito.

NO STARS — The worst dining experience we’ve had in two months in Spain. Inedible food served by a rude surly waiter who tried to pad the bill. Please pass this one by and maybe they will soon be out of business.

Aunque su situación es inmejorable, en plena Plaza de la Encarnación, y el local es grande, la verdad es que no destaca especialmente por nada. Lo único que merece la pena es la terraza.
Se trata de un bar normal y corriente con carteles de platos combinados decorando sus paredes. Parece orientado al público extranjero recurriendo para ello a los tópicos-​típicos (paellas,…).
El personal tampoco es nada del otro mundo, educados pero poco más, ¡les cuesta sonreir!

1 estrella y porque no puedo dar menos.
Bar caro la comida horrible el trato infame… un sitio a evitar

Este bar es de lo peor que se puede cruzar en tu vida.
La última que he estado, la semana pasada, estaba apestado de tunos de Derecho (con 50 años) haciendo ruido, siendo soeces, y en fin muy desagradable todo.
El café no es nada del otro mundo, los churros, pues aquí no los he comido, y los platos abusan del aceite, por lo que, no no si quieres mantener íntegro tu estómago.
Lo único decente de lo que disfruta esta cafetería restaurante es de su emplazamiento y de su terraza.

Este bar no me gusta. Tiene fama por los churros, dicen que todos los sevillanos los hemos probado aquí. Yo los probé una tarde compras por el centro con mi tía. La comida me parece más grasienta de lo normal, de la de sal de fruta y paseíto después. Y en general le veo un aire de cutrez importante.
Cuando trabajaba en la calle Imagen alguna vez entré a primera hora, antes de comenzar la jornada. Es de las cafeterías que abre más temprano por allí, a las siete ya estaba la máquina encendida. Y eso se agradece el día que llegas con el ojo pegado. Pero, es eso, que el ambiente, la decoración y el aire del local me ponen nerviosa. No es un sitio que me invite a quedarme, ni siquiera a disfrutar del café. Desde que se terminaron las obras de la Encarnación su terraza ha ganado protagonismo y la verdad es que siempre que paso está lleno.

Has desayunado alguna vez en el Spala? Pues ya estas tardando. He ido miles de veces a este bar, cuando era mas jovencito y salia de noche por los bares de la calle Siete Revueltas, todos desaparecidos ya, siempre nos daba la mañana y cuando pasábamos por la Encarnación entrabamos a desayunar porque estaba abierto.
Antes la plaza era muy incomoda, era prácticamente un aparcamiento de autobuses, las aceras del Spala eran muy pequeñas y la terraza se reducía a dos mesas pegadas a los cristales del bar. El bar era mas pequeño también pues lo que es el salón comedor de ahora era una sala de juegos, la cosa ha mejorado, por lo menos no tienes que desayunar escuchando la musica del séptimo de caballería que salia de las maquinas entre jugada y jugada.
Tanto por la mañana como por la tarde tienen churros y chocolate que los hacen ellos mismos al momento, no son congelados. Tienen menú al mediodía y un salón limpio y cómodo, no es el sitio mas bonito y mas romántico de Sevilla pero para algo rápido y salir pitando es ideal, tanto dentro del local como en la terraza, que ahora si tienen, por lo menos veinte mesas.