Fitness Total

Este fue el primer gimnasio al que me apunté. En mis años de instituto, mi grupo de amigas decidió practicar un poco de deporte todas juntas, así que aquí nos plantamos. Nos apuntamos a aerobic para probar, era la primera vez. Bueno, entre que no lo habíamos hecho nunca y la falta de coordinación entre brazos y piernas, fuimos el espectáculo de esa tarde. Al día siguiente, sólo yo fui la única que continuó, las demás se dieron de baja.
Así que yo, con mis clases de aerobic y mi media hora de bici antes de cada clase pasaba casi todas las tardes, así estaba, hecha un figurín (juventud divino tesoro). En aquél entonces ya tenían pantallas donde poder visualizar lo que estaban echando en ese momento por televisión. El pedaleo se hacía más ameno.
Está todo integrado en una misma sala, musculación (máquinas) y actividades grupales, así que para los que tengan vergüenza va a ser un poco aparatoso. Eso sí, todos los profesores te ayudan a conseguir tus objetivos «fitenssianos» (cómo me gusta inventarme palabras).
Ah! por aquél entonces el precio no era tan barato y el horario era más limitado, ¡pero es que ahora están las 24 horas!