La Taberna Roja

Fui una vez solo y la verdad es que no hemos tenido muchas ganas de volver. Cenamos de tapeo, no estaba mal del todo, normalito en comparación a otros sitios donde hemos estado. De lo que no hemos probado, no puedo opinar, claro jejeje Pero lo que pedimos al final, sí que me echó «patrás»… Pedimos una empanada de atún y nos sacaron la típica empanada del super, con lo fácil que es hacer ellos mismos la empanada, incluida la masa, o comprarla congelada si es mucho apurar, y la verdad es que sabía a empanada de esas, del super.
Igual hay otras cosas más buenas, no digo que no porque seguramente sí las hay, pero la empanada ya me dijo suficiente del sitio.

De entrada local a añadir a mi lista de Torneró.
Anoche fuimos a cenar por primera vez.
Ya tenia buenas referencias por una de mis hijas y no me defraudó.
Local amplio y limpio, de decoración y mobiliario modesto pero cómodo y agradable. Servicio atento y amable.
Con la bebida te ofrecen una tapa a 0,60.Buena oferta de vinos a buen precio.
Botella de Ribeiro a 8 euros presentado en cubitera.
Probamos el montadito Cántabro y el Almussafes. Muy buenos ambos sobre todo el Almussafes. Completamos la cena con ensalada de ventresca, tabla mixta jamón y queso y tabla de foie. Todo muy bueno y de agradecer que no te la claven con el vino. Total 20 euros por pareja.
A tener en cuenta para cenitas de pensat y fet.

Un sitio estupendo para tomar unas cañas y unas tapas excelentes. Con la primera consumición tienes derecho a un buen montadito caliente por solo medio euro, deliciosos.
Aparte de eso tienes unas tablas de embutido de calidad, botellas de vino a buen precio y el local es muy agradable, espacioso y el personal atento y amable.
Es un sitio en el que repito con frecuencia por su calidad y buen precio.

Very tasty food and good service, good prices and a cool atmosphère, i recomend it without a doubt

Antes ponían tapa de regalo, pero ahora hay que pagar 50 céntimos por ella por cada bebida. Buena relación calidad precio, buen servicio. Tablas de ibéricos y quesos distintos de buena calidad. Pan con tomate y aceite aunque el pan es mejorable. Ensaladas con muchos ingredientes. Como muchos locales sacrifican la comodidad en favor de la funcionalidad y no hay sillas y si taburetes incómodos de madera. Junto a la pared se esta mejor pues puedes apoyar la espalda en los polletes corridos que hay. Bastante espacio donde no hay agobio y decoración profesional. Lastima algún mural de publicidad que estropea la labor del decorador. En verano hay zonas más calurosas que otras. Mejorable climatización. Mejor al fondo. Recomendable en general.

A good place for Tapa and beer. Good for smaller or larger groups. Speciality: White wine from the north of Spain that is served in a low wide glass. the only minus is the chairs, where you can not lean back. That makes you a back pain after half an hour.

Muy buen lugar para ir a tapear, comer o cenar, con amistades o en plan parejitas. Servicio y atención rápida. Buen precio y calidad de los alimentos. La verdad que es de los sitios en los que últimamente he ido y me ha gustado mucho, así que sin dudarlo os lo recomiendo.

De mis favoritos de Xuquer, es un sitio ideal para quedar con amigos, tienen un menú a 15 euros por persona con barra libre que esta fenomenal. Siempre apetece entrar a tomarte una cañita o una taza de Ribeiro con pinxo incluido, camareras súper atentas y aunque la carta es corta esta todo tan bueno que apetece repetir, muy recomendable las empanadas de carne y atún y la tabla de cecina deL Bierzo, puedo atestiguar que es la autentica Cecina ya que mi padre es leones y he comido mucha, bueno que lo disfrutéis.

Soy cliente habitual y una de sus ventajas es que SIEMPRE está abierto. Local con muy buen ambiente y una comida sin disfraces a buen precio y lo mejor, las cañas y los vinos por copas con su montadito gratis y muy bien tratados en cuanto a servicio y temperatura. Perfecto para cenas de grupo y tomar unas cañas por la tarde, pero abre a las 8 de la mañana y tambien hace desayunos, almuerzos y, una cosa que no existe casi en Valencia, cañas y vinos en la barra antes de comer, sorprendente.

Buenos montaditos, carta corta pero excelente, servicio rápido y eficiente, precios competentes

Mi segundo local favorito de Valencia. Por la calidad, por el servicio y por el precio.
Tardé en ir, y eso que lo tenía al lado de casa. Me echaba atrás la decoración –ya veis, una cosa mía: me apabullan las grandes superficies en rojo, verde, morado…-. Pero en cuanto lo probé ya no hubo marcha atrás. Soy fan incondicional de la Taberna, y la defenderé a ultranza mientras siga como está. Son ya unos cuantos años de crisis económica, y no sólo se ha mantenido al pie del cañón mientras otros caían, sino que también ha mantenido la calidad. Y eso promete.
La cosa va de tapas. Copa de buen vino o caña –bien tirada– con tapa de regalo. Porque las tapas no se venden. No puedes pedir un montado, ni pagando. Los montados los DAN con la consumición. Y QUÉ MONTADITOS, señoras y señores… pan al punto, lacón recién cortado, tortilla de patatas antológica, salmorejo al punto… productos de calidad, mimo en la presentación, estudio en el bocado, y ninguna decepción. No sabe a poco por racanería en la ración, sino por pura adicción. Y lo mejor de todo: el 2º montado es diferente, y el 3º, y el 4º… para ir probándolos tienes que alargar la reunión –o pedir una tabla de montaditos, pero eso es trampa ;) — En serio, vale la pena ir de tapeo. Van cambiando la lista de montaditos cada un tiempo, así es que no es difícil probarlos todos.
Por supuestísimo, también es un buen sitio para ir a comer o a cenar con amigos. Algo ruidoso, y el precio puede subirse fácilmente, pero tanto las tablas como las ensaladas están de vicio, y aunque sales colmado nunca tienes la sensación de haber cenado demasiado.
Tiran bien la caña, y el vino de la casa es una buena opción –lo digo sinceramente, más de una vez me ha sacado de un apuro cuando no sabía qué regalar: basta con ir a la Taberna y comprar una o varias botellas de su vino-​. Y, para no bajar el nivel, las infusiones y el café también están deliciosos.
Tiene terraza y wifi (aunque no hay enchufes, así es que id con las baterías cargadas porque pasaréis un rato largo). Y mas os vale llegar con tiempo si vais en coche, porque aparcar es algo complicado según horas.
En resumen: mi recomendación es que no os lo perdáis, que probéis a salir de tapeo. Con un par de consumiciones (con sus respectivos montaditos) podéis cenar a muy buen precio, y si os quedáis con hambre siempre podéis pedir una tabla para compartir, o un pincho. Y ahora os dejo, porque tengo que acabarme el que me han traído ;)

Me encanta. Adoro a su gemelo de Ruzafa y por consiguiente adoro este también. Y aunque los precios son un poquito más elevados, su amplia carta de vinos, cervezas, ibéricos, tostas hace que gane.
Bueno, quien este buscando una buena taberna por la zona universitaria o un rinconcito para cervecear o tomar un vino con los amigos después de las clases que se deje caer por aquí. Y aquí hago un inciso: si quieren leer una reseña objetiva, pasen a la siguiente. Porque yo después de ver el montadito que traíà la camarera con mi caña me quede enamorada y no lloré porque estaba el bar a reventar, pero confieso, esfuerzo tuve que hacer. :) :)
Local bastante amplio y bien decorado. Su carta se basa principalmente en ibericos, ya sea sobre tostas o mega tablas para compartir como buenos hermanos. Para beber tienes donde elegir, te puedes decantar por tintos, rosados, blancos o cervezas rubias, eso ya va por gustos… Sea lo que pidas y siempre que la compañia sea acertada no creo que nadie salga de este local de mala gana.
Asi que pasen, tomen asiento y disfruten del espectáculo

Mi primera visita a La Taberna Roja y muy contenta con lo que me encontré!
Llegamos casi a las 23.45 de la noche y sin embargo no nos pusieron ningún tipo de problema para cenar. Pedimos una tabla de montaditos variados y una tabla de foie. La de montaditos era una tabla normalita, con jamón, queso, dátiles… Pero la de foie estaba realmente buena! Servida con dos mermeladas diferentes (que fuimos incapaces de identificar al 100%, imagináos qué paladares tan exquisitos!) y rebanadas de pan con cereales, servidos calentitos, lo que mejoraba aún más la mezcla. Dos cervezas, dos refrescos y un café… ¿Total? 8 € por persona…
Un precio genial, en un local muy acogedor, con un servicio muy atento y agradable y con una comida riquísima… ¡Seguro que vuelvo!

La verdad es que no conocía este lugar y llegamos a él de pura casualidad.
Una noche hace poco había quedado con un grupo de amigas a las que hacía tiempo que no veía. En un principio habíamos quedado en otro local, pero se retrasaron y no pudimos coger sitio en él. Entonces una de mis amigas se acordó de un local por el que había pasado cuando volvía de aparcar, y para allá que nos fuimos.
Ya de entrada la imagen del local prometía una buena experiencia.
El lugar está muy bien porque es muy amplio y tienes la carta escrita en una pizarra gigante en la pared.
Nos pedimos unas bebidas y luego dos tablas para compartir, Con cada cerveza nos trajeron una tapa de lacón con pimentón, allioli y tortilla de patata…¡estaba to rico!
Las tablas también nos dejaron muy buen sabor de boca. La primera era una chapata gigante que la sirven cortada en doce porciones y con tomatito refregado. Habían cuatro de pollo con queso, cuatro de jamón con queso y cuatro de bacon con queso y dátiles. La otra tabla era de lomo embuchado con diferentes tipos de quesos y un vasito con tomate para echar en cada porción de pan.
Salimos muy contentas, tanto por la comida, como por el trato que nos dieron las camareras (si alguien va y tiene alguna duda que no dude en preguntar, son muy majas y te lo explican y recomiendan sin ningún problema) y por supuesto por la cuenta.
Da gusto cuando se sale fuera de casa a tomar algo y se disfruta de una buena comida en buena compañía sin necesidad de avalar la comida con un riñón.
Creo que volveremos pronto para celebrar algún cumpleaños porque vimos que tienen un menú para grupos que incluye mucha comida, postre y barra libre por 15 euritos.

Este bar no lleva mucho tiempo por esta zona, pero ha tenido una increíble acogida, y la verdad es que el sitio merece la pena. Es un sitio ideal tanto para cenar, para tomarte una cerveza o un vino, o tomarte una jarra de té calentito.
Quizás lo más destacable de esta taberna son las tapas que te ponen con la bebida, que por lo general están bien elaboradas y calentitas en el horno. La última vez me pusieron una con tomate, queso con orégano y jamón serrano por encima. Buenísima.
Hace poco una amiga celebró allí su cumpleaños y estuvo genial. Teníamos ya un precio cerrado para la cena, que fue a base de tapas, bebida a cascoporro y unos postrecitos buenísimos. La única pega es que éramos bastante gente y no hay mesas muy grandes. Estábamos en una esquina del local con la mesa prácticamente empotrada, y era un engorro cuando alguien del fondo tenía que ir al baño. Pero bueno, esto se olvida rápido por lo bien que se come y sobretodo por lo simpáticos que son los camareros.
Una cosa que me llamó la atención una vez fue un grupo de señoras mayores que se sentaron en una mesa e inauguraron la velada con dos pedazo de jarras de cerveza. Ya quisiera estar yo así a esas edades.

Muy chula esta taberna decorada en madera roja y verde (me encanta la puerta de acceso a los baños rollo Saloon) además un sitio de esos que molan para ir a tomarte unas cañas por la tarde (te sirven un montadito con cada una, cosa excepcional en Valencia) y ya puestos quedarte a cenar que se está la mar de a gusto. Tablas de embutidos, foie, chorizos a la sidra, empanada gallega, ensalada, lo cierto es que cenas a gusto y barato. Pero si reservas para una cena de al menos quince personas tienen unos menús muy buenos que incluyen barra libre…
Lo que me faltaba para que este sitio me terminara de encantar es que el otro día paso por la mañana y entro a tomarme un café y estaba muy bueno, parecerá una chorrada pero los que sean cafeteros como yo sabrán a lo que me refiero.

Situada por la zona de Xúquer, es una taberna de toda la vida con un toque modernete que la hace muy agradable para tomarte unas cervezas y charlar. A mi me gusta el aire a taberna que se da, con la indispensable pizarra con vinos y sus mesas cuadradas y taburetes. Todo, eso si, muy rojo, que para algo se llama como se llama.
En la Taberna Roja presumen de tirar las mejores cañas de Valencia, y creo que razón no les falta. Pero creo que sus cañas son buenas por el simple hecho de que siempre, siempre, las acompañan de un montadito. Y los montaditos están aseaetes, nada de trozos de pan secos con jamón salado encima. Además, si quieres acompañar la cerveza o el vino con algo más que un montadito te preparan unas tablas de embutidos o un foie con mermelada (a precio de plebeyo) con los que puedes merendar-​cenar muy bien.
Aunque es perfecta para cervezas de media tarde, los fines de semana también se puede desayunar a precios populares. Lo de los desayunos es importante apuntárselo, pero más importante es tener en cuenta las catas de vinos que organizan para dar a conocer caldos de la zona. No creo que haya mejor ocasión para una primera toma de contacto con la taberna roja.

Se jactan de ser el lugar «con las cañas mejor tiradas de toda Valencia». Sea verdad o no, lo cierto es que no las tiran nada mal, están bien de precio y sacan una tapita con cada una. Aunque yo casi nunca me he decantado por las cañas, será que soy de buen beber y tiro directamente por las jarras.
Tienen, además, una pizarrita con los vinos que sirven, que no son demasiados pero no están mal (también bien de precio) y las camareras siempre me han parecido bastante, bastante simpáticas, si bien no son las más rápidas del multiverso, que diría el gran Terry Pratchett.
Por cierto, el local cuenta con Wi-​Fi y creo que fue uno de los primeros en ponerlo por la zona, que aquí por Algirós somos bastante chapados a la antigua. Eso, sumado a que el local es relativamente amplio, con asientos y mesas de madera de color rojizo (sorprendente, ¿eh?) le dan un toque… pues eso, de taberna roja. Si es que hasta el nombre le va bien.