Local pequeño pero muy acogedor, resulta una mezcla entre taberna-bar-restaurante. Como bar tiene tapas de un bocado muy apetecibles y accesibles(2 €): croquetas, torreznos y su Rolling(tostada de boquerón y anchoa con pimentón). Lo mejor sin duda sus anchoas de Paniza, no perderse la de hielo pilé con vodka, original y sorprendente. La anchoa gordica, plena de sabor y sin una sola raspa. De taberna tiene unas tostadas muy interesante(5 €): foie, solomillito a la brasa y atún rojo. Y unas madejas mañas que quitan el hipo. Como restaurante sus pulpo o su rabo, aunque me quedo con el carpacio de buey. El local es pequeño y tendrá 6 – 7 mesas, asi que es imprescindible reservar o ir a primera hora. Fuera tiene 4 mesas altas. El trato es fenomenal: gente con ganas y cercana, trato familiar. Buena opción para cualquier ocasión.
Néstor M.
Rating des Ortes: 5 Madrid
Este restaurante se encuentra en pleno centro histórico de Zaragoza. La primera impresión es que es algo pequeño pero decorado con buen gusto y muy acogedor. Además tiene una buena bodega en la planta inferior, por lo que no es tan pequeño como parece a primera vista. La cocina es tradicional y casera, con muy buena calidad y una excelente relación calidad precio. m Una atención muy personalizada por parte de Toño y muy buen ambiente. Según nos cuentan el restaurante es nuevo, tiene menos de un año y están apostando por una cocina casera y de calidad. Totalmente recomendable. Como sugerencia, las croquetas de bacalao y langostinos y los huevos rotos acompañados con jamón, morcilla o longaniza son una buena elección. Un lugar para repetir, sin duda.