Es un local normal de la franquicia pero con algunos detalles que lo distinguen un poco de otros. En primer lugar, es bastante amplio y las mesas están lo suficientemente separadas como para moverse cómodo y no estar encima de la persona de al lado. Además, al menos por las mañanas, nunca está demasiado lleno, lo que lo hace un lugar tranquilo ideal para tomar un café mientras leemos algo. Y ahora que están llegando(muy de a poco) los días lindos, las mesitas afuera, sobre la entrada de la estación y no en la vereda al paso de todo el mundo, son geniales. Finalmente, es de destacar la atención, mucho mejor que el promedio de la franquicia, en particular la parte de compra de café, atendida por el dueño del local.