El Nuevo Castell’s

Que desastre, pedimos una milanesa
de la casa que era nada más ni nada menos que una suprema de pollo con una feta de jamón, queso y un huevo frito arriba, las papas fritas estaban cocidas en aceite viejo, pedí una merluza al Roquefort que no tenía gusto a nada, las bandejas no se podían agarran de la grasa acumulada que tenían y como frutilla del postre se me ocurre ir al baño, POR DIOS … Pase por la puerta de la cocina y no puedo explicarles la mugre que había, tenían en una especie de patio que daba a los baños una mesa de madera que vaya a saber que cortaban ahí y que la estaban limpiando ahí mismo con un balde y una rejilla inmunda. NUNCA MAS, deberían clausurar ese lugar

Desde hace rato me comentaban sobre este lugar así que tenía mucha curiosidad por saber que era.
Es otro bodegón de barrio, pensé cuando llegamos, y por dentro se ve así también. Pero a la hora de comer, le pasa el trapo a todos los otros.
La atención es inmediata y los platos son aparte de bien elaborados, ricos y muy abundantes.
Para el que gusta de un buen comer.

Para ir en grupos, un lugar donde se come bien y barato, muy barato.
Ambientadocon camisetas y banderines de futbol, mucho ruido.
Un problema es que no aceptan reservas, por lo que se llena mucho, ni tarjeta.
La parrilla no es lo mas recomendable del lugar. No es mala, pero la suprema a la suiza es lo mejor que comí ahí.
Lo malo es que no hay gaseosa tamaño grande, algo logico para el lugar

Un bodegon imperdible! Muy porteño! Vas hacer cola, las mesas son chicas y demasiadas para el lugar, vas a ver que la limpieza podria ser mejor, pero vas a comer como nunca en tu vida. Muy buena cocina. Tremendas porciones. Muy recomendable. Son esos lugares que tenes que conocer… y al que luego vas a volver.

El ambiente es ruidoso, eso no quita que no sea cálido, entretenido y muy familiar. Dependiendo donde te ubiquen, el mozo que te toque sera ó mas ó menos atento, eso te puede cambiar la velada…
Los platos son abundantes y llegan bastante rapido, algunas veces inundados de salsa o con mas guarnición que plato principal. Lo mejor que he probado son las milas, el gramajo y los menúes con pollo. La salsa blanca es algo líquida. La comida es buena para mi gusto; eso si, depende del grado de presentación al que cada uno este acostumbrado…
El lugar es limpio y algo estrecho (ideal para hacer conversación)
No da para ir todos los días. Los precios son justos. Si querés comer rápido te conviene pedir take away (por teléfono mientras no sea domingo «día de algo» tarda una eternidad).
Hay que ir temprano porque el tiempo de espera puede llegar a ser de 45′.

A fines del año pasado volvía en taxi con una amiga de una cena que, podemos decir, había tenido gusto a poco. El conductor atento a la conversación nos preguntó:
— «¿Me permiten que les recomiende un lugar para la próxima.?»
— «Si, claro» respondí entusiasmada
— «Acá, a unas cuadras hay un lugar donde solemos parar los taxistas que es una maravilla»
Agradecí y anote la dirección.
Tenía razón. Un bodegón por definición: cálido ambiente, porciones generosas y precios económicos.
Minutas varias, variedad en la parrilla y buenos platos del día. Recomiendo los tallarines con estofado de carne, riquísimo y muy abundante.
Para los futboleros, banderines de equipos del ascenso colman las paredes. Muy buena atención. Lo único negativo: suele haber bastante gente y fines de semana puede haber espera.

Aquí hacen una de las mejores milanesas napolitanas con fritas de la ciudad. Es un bodegón con cero pretensiones frecuentado por taxistas (todos sabemos que dónde hay taxistas se come bien, abundante y barato).
Los sábados a la noche se llena de gente del barrio y no tan del barrio. Anoche quisimos ir y tuvimos que llevarnos nuestras gloriosas milanesas a casa porque había fila hasta la calle para ocupar una mesa. Los afortunados que estaban sentados comían parrillada, ravioles, costillitas de cerdo, merluza al roquefort, todo con muy buena pinta. Igual recomiendo las minutas más que la parrilla.
Los precios son bajìsimos y aceptan tarjeta de débito. Un punto muy importante es que la cocina està abierta hasta más o menos las 3 de la mañana así que es un gran lugar para bajonear. Tienen delivery hasta la 1.