El Sanjuanino

Muy buenas empanadas de carne. El ambiente es el típico bodegón de barrio, la atención w muy rápida y las empanadas que comí (carne y gran sanjuanina) estaban muy buenas y sabrosas! Bien jugosas y con el picante justo!!! Lo recomiendo para comer comidas típicas en un ambiente familiar y relajado.

Me desorientó mucho ver que en Unilocal le dan tan buen puntaje a un lugar tan… chato (por no decir ch*to)
Solíamos pedir delivery de las empanadas, hasta que mi hermana se intoxicó y lo dejamos de lado. Hace poco, un día de lluvia y mucho frío, me acerqué a comer con ganas de un buen guiso, viendo reseñas muy buenas en Unilocal y dejando de lado experiencias previas. Me decepcionó bastante.
Ningún lugar que le pone aceitunas enteras, con carozo incluido, a las empanadas de carne puede tener «las mejores empanadas de Buenos Aires» como leí por acá. A mi gusto, condimentan mal las empanadas. La de carne tenía más comino que otra cosa, opacando el sabor de la carne (que es picada, no cortada a cuchillo) y la de pollo no se que tenía porque no tenía gusto a nada y encima llegó fría. Si te llegan tres empanadas al mismo tiempo pero a distintas temperaturas es porque alguna está recalentada, flojo.
La atención es mala, la ambientación safa por la música pero deja qué desear en cuanto a tamaño, ruido y servicio, los cubiertos, platos y servilletas son al estilo Kentucky, muy ordinario en general.
Después de las empanadas probamos un guiso bueno y un locro decente, 6 o 7 puntos, que es lo que me impide darle una estrella a un local que ofrece lo mismo que muchos otros, a menor calidad y mayor precio. No se si volvería.

Estaba buscando un lugar para comer la típica comida patriótica el 25 de mayo, y por sugerencia de Unilocal me decidí por este lugar.
Antes que nada, la cantidad de estrellas no es por cómo comí, sino porque el lugar no es lo más lindo del mundo, ni la atención fue la mejor. Servilletas de papel de esas que no limpian nada (como las de las pizzerías), la copa medio rota, la limpieza de las migas de la mesa que cayeron sobre mis piernas en su totalidad en lugar de quedar en el trapo del mozo… aunque debo confesar que todo eso tiene cierto encanto.
Pero bueno, la comida fue justo la que buscaba. Empanadas que no dejaron nada que desear (excepto, tal vez, el precio) y un locro al que no le dejamos ni las migas, bien espeso y completo. Vino de la casa, servido en el pinguino, coronó la experiencia para que fuera criolla completamente.
La ubicación es bien cómoda, cerquita del Alto Palermo.
Atención: No aceptan reserva ni tarjeta, solo puede pagarse en efectivo.

As empanadas são muito boas e o atendimento é muito bom e descontraído. Vale a pena experimentar, principalmente as empanadas de carne (suave e picante) e frango (pollo).
As carnes também são boas, mas um pouco sem tempero para o paladar tupiniquim.

While vacationing in Buenos Aires we visited this restaurant twice. Definitely the best empanadas I’ve had. They also carry delicious wines and a large dessert menu. Their traditional locro is served with bread. I highly recommend it. My favorite empanada was the mozzarella, basil, tomato. Also tried spicy beef, beef, chicken, and vegetable. All great.

Las mejores empanas por lejos. Es lo único que pedimos ahí, debería tener en cuenta los demás platos. No se puede dejar de pedir empanadas ahí.

Llegué a El Sanjuanino porque tenía que ir al cine y no había almorzado y ya eran las 6 de la tarde. Mi amigo me recomendó pasar por acá antes de asistir a la función y me hizo incapié en que con una empanada iba a estar más que bien. Y tenía razón.
Con un tamaño no convencional, sus empanadas tienen un tamaño extra size que te garantizan quedar pipón. Pero no solo el tamaño es lo importante de estas empanadas. Los gustos que ofrecen son varios y de los más ricos. Muy caseros y sin parecerse a otras empanadas ya que las empanadas siempre tienen gusto a empanadas.
Recomiendo las capresse y las de carne cortada a cuchillo.
Ah, tienen delivery, pero es mejor ir a buscarlo porque tardan en enviarlo.

La lucha sin cuartel de la mejor empanada argentina la tiene ganada la provincia de Salta, según un sondeo popular que cualquiera de nosotros podemos hacer, pero bajo mi visión, nadie tiene el primer puesto, y con esta reseña no busco una falsa modestia para ganar la simpatía de todas las provincias, este debate siempre se termina cuando se está ante una canasta llena de cualquier provincia del norte. Pero El sanjuanino esta dispuesto a ganar algún galardón al menos, por ser el único en el centro de Palermo. Con la variedad tradicional de un pueblo, y con el color decorativo traído desde la provincia de Domingo Faustino Sarmiento. Con el menú ancestral del norte, como tamales, humita, locro y sin dejar de lado el vino que tan famosa hizo al distrito del Nórdico. Lo que queda es rastrear más restaurantes de las otras provincias para sacar un veredicto y premiar a la mejor empanada. Pero a pesar del enfrentamiento culinario, la experiencia de este local es única, para el que le guste comer sin viajar

Soy fanática de la comida regional y haber encontrado El Sanjuanino en Buenos Aires fue la gloria. Es increíble que en pleno Palermo pueda comer tamales, humitas o hasta locro.
El local es pequeño pero super pintoresco. Te da la sensación de estar en un restaurant de algún pueblo, lejos del ritmo de la gran ciudad. El local es bien tradicional, con mucha madera y decoración rústica, y la atmósfera que reina es sumamente familiar y descontracturada. No hace falta ir vestido con las mejores ropas; en El Sanjuanino todo es sencillo y eso es lo que hace que me guste tanto.
En el menú no sólo hay comidas regionales sino también algunas otras opciones para los paladares menos acostumbrados a este tipo de comidas. Ofrecen algunas carnes, ensaladas y pollos que, si bien no tienen tanta variedad, son buenas alternativas. También hay empanadas caseras de todos los sabores, así que es imposible que no encuentres algo que te guste en el menú.
Los postres son también tradicionales: hay, por ejemplo, quesillo con dulce de alcayota, zapallos en almíbar, mammon, empanaditas con nuez, ente otros. Todas opciones que no vas a encontrar en otros lugares de Buenos Aires.
Sea lo que sea que pidan, les recomiendo que lo acompañen con un vino mistela bien dulce. El que venden en este lugar es realmente excelente.