Santos Sabores

Lindo lugar frente a plaza armenia, si hace mucho calor y te sentás en las mesas de adentro puede que lo sufras un poco. La atención a pesar de ser un poco lenta es buena. Tienen mate para ofrecer y mesas con enchufe y wifi, te podés pasar un buen rato estudiando o trabajando que no te va a faltar nada. La comida rica, y los precios relativamente altos al igual que el resto de los lugares por la zona. Volvería

Santos Sabores tiene muchas cosas a favor, pero un par en contra que a mi entender le juegan muy en contra.
El local me gusta bastante, está frente a plaza armenia y tiene una terraza muy buena. Es muy abierto, aireado y cuenta con mesas para trabajar cómodamente con una notebook, solo o en grupos. La mesa comunal del fondo o las que están contra la pared tienen todas enchufes a distancia justa.
Otra cosa muy buena de Santos es la calidad de la comida. Todo lo dulce viene de Nucha. Y las ensaladas y opciones de desayuno son bastante variadas. Muy fan de la opción Ranchera o Papas O’Brien.
Ahora, sinceramente, el precio no va de la mano con la calidad.
En cualquier lugar de la zona podés conseguir un desayuno igual o más completo por menos costo.
Otra contra viene del lado de que sea tan abierto y esté tan sobre la calle. El ruido de los autos se nota, especialmente los días con más movimiento por el barrio.
En definitiva es un lugar que está muy bien, pero con pequeñas mejores podría ser genial.

Fui con amigas un sábado a la tardecita y merendamos. Estaba bastante lleno, así que nos sentamos en la mesa comunitaria, que se puede compartir con otras personas.
Nos atendieron bastante rápido y fueron bastante amables. El té que ofrecen es de Tealosophy, muy delicioso. Yo pedí la merienda para compartir con una amiga y es supercompleta, tiene de todo y me gustó mucho tanto lo dulce como lo salado. Y como me encanta lo dulce, recomiendo los cuadraditos dulces, son geniales.
La decoración del lugar me pareció linda y los panes, muy tentadores. Los precios también son accesibles. Creo que volveré, porque me gustó bastante el ambiente, la atención y lo que ofrecen.

Santos es un lugar que suelo elegir para ir a tomar el te a la terraza, con vista a Plaza Armenia. A esa hora suele haber poca gente los días de semana y se puede estar tranquilo. Si vas con un grupo está bueno pedir varios cuadraditos dulces que son riquísimos (la cheescake!), si querés una opción tranqui. Para los que llegan con hambre a la merienda hay un té que trae la mitad de la carta, casi.
Lo recomiendo para ir mientras dure el calorcito, ir, tomarse un licuado fresco y recostarse en uno de los sillones cerca de la baranda.
Aviso, hay que ir relajado y con paciencia, más si estás ubicado arriba. El servicio puede llegar a ser un poco lento, aunque no haya mucha gente en el bar. No tienen gente atendiendo arriba todo el tiempo y dependés de que quien te venga a atender suba cada tanto.

La terraza de Santos Sabores en verano puede ser uno de los lugares más agradables de los alrededores de Plaza Armenia. Pasé mil tardes ahí tomando la jarra de limonada con menta y jengibre, o si no hace mucho calor un mate (Santos Sabores es de los pocos lugares que te sirven mate con bombilla).
El lugar tiene una onda «sana», pero no al extremo de no ofrecer gaseosas o cervezas, como ocurre con otros lugares naturistas. Acá podés comer una focaccia con cerveza pero también ensaladas (verdes y de pasta).
Su fuerte igual son las meriendas o desayunos: americano, con huevos revueltos, ranchero, con omelette y una buena variedas de tés (chinos y africanos) hacen de Santos Sabores un lugar distinto.