Brulatty

La atención es buena, la comida no demora, el precio es razonable, la calidad es buena.
¿Lo malo? Moscas por doquier, odio comer espantando moscas.
De todos modos sigo pensando en esta tarta de espinaca desde el penúltimo bocado. Como no quería ensalada me la prepararon con puré.
Si, soy complicada, y qué?

Sehr schöné Bar bzw. Eisdiele an der Cañada. Für Eisfans dürfte das Brulatty wohl eine der besten Anlaufstellen in Córdoba sein. Aber auch als Café kann es überzeugen, auch zu Essen gibt es. Die kalte Platte (picada) ist sehr gut, Pizza würde ich wohl eher woanders essen.
Drinnen werden alle wichtigen Sportereignisse übertragen, sonst geht es dort eher gemütlich zu. Draußen ist in der Regel mehr los, hier kann man den zahlreichen Passanten zuschauen. Hervorzuheben ist das sehr nette Personal.

Le vamos a clavar un 3 porque tiene un buen wifi y nos pasaron el partido de los pumas cuando estabamos con Gonza laburando un rato en Córdoba
El lugar es una cafetería/​heladería/​restobar que no termina de elegir un camino y stick with it. El café no es nada malo, para nada. Aunque tampoco es RICO nivel vamos a Brulatty a tomar ese café
No tuve la chance de probar el helado porque venía de comer un lomito tamaño mi casa. Pero destaco la comodidad, enchufes, wifi y buena atención.
Aparte, estaba a 1 cuadra del hotel.

Me encanta esta cafetería y bar/​restaurante porque es muy versátil con su oferta de comidas y bebidas. Las pizzas son muy sabrosas y sus helados, increíbles. Casi siempre me escapo ahí para saborear su dulce de leche granizado (mi favorito). Es un poco más costoso que Grido, pero en calidad no hay punto de comparación. Sus helados son cremosos al estilo Bariloche. La atención es impecable y trabajan muy rápido. Lo que más me gusta es que, cuando pedís un café, te traen de cortesía una copa bien grande de soda (en muchos lugares te cobran ese vaso). Muy recomendable para ir en familia o para charlar varias horas con amigos. Suelen tener muchos combos de meriendas riquísimas. Muy recomendable!

A Brulatty lo conocí porque quedaba en el punto medio entre mi facultad y la casa de una amiga que ya lo había probado y nos dijo que teníamos que probarle sí o sí. Menos mal. Es uno de los helados más ricos que probé en mi vida, si no el más rico. Pero el helado no es lo único que vas a conseguir, también ofrecen picadas, minutas, menú ejecutivo y pizzas riquísimas. Siempre que voy a heladerías nuevas pido gustos clásicos porque no sea cosa que me clave con algún sabor que no me guste y tenga que desperdiciar un poco de helado no? Brulatty no iba a ser una excepción y me pedí un cucurucho de dos bochas con chocolate Rocher y dulce de leche con brownie, bien light por supuesto. Me sorprendí cuando note que las dos bochas equivalían a 5 y de repente el helado casi me tapaba la cara. Lo probé y ame totalmente, me lo terminé todo. Volví miles de veces y de a poco fui variando el pedido. Un tip: si vas a consumir ahí te sirven en copas de vidrio, el cucurucho es solo para llevar y una re buena opción es pedirlo para llevar y cruzarse a Plaza de la Intendencia para pasar el rato. Otra cosa que me llamo la atención es que muy pocas veces se quedan sin un gusto, los reponen rapidísimo. Aceptan sólo efectivo.

Brulatty es sin dudas una de las mejores heladerías de Córdoba. Ubicado sobre la Cañada, en un hermoso local, se convierte en el lugar que elijo para tomar helados cada vez que estoy cerca.
Existen muchas heladerías en la ciudad, pero a veces resulta difícil encontrar una de calidad. En este caso, Brulatty lo es. Los helados son realmente artesanales, con una textura cremosa y un sabor especial que solo existe en heladerías de buena calidad.
El local es algo pequeño, pero es suficiente para contener unas cuantas mesas en su interior, más algunas otras sobre la vereda, cubiertas por sombrillas, ideales para días de mucho calor. Los helados pueden consumirse en el local o pedirlos para llevar. La variedad de gustos es muy grande, y lo más interesante es la originalidad de los mismos, con sabores únicos que no se encuentran en ningún otro lugar.
Pero los helados no son la única especialidad de Brulatty, ya que además funciona como cafetería, pudiendo consumir diferentes opciones dentro de un menú algo acotado pero suficiente.
La atención siempre que he ido ha sido buena, y los empleados suelen ayudarte a elegir entre tanta variedad de sabores. Incluso te hacen probar una cucharadita de alguno si estas en duda.
Creo que esta heladería es la opción ideal para todos los peatones en el centro con antojo de un buen helado. El local es cómodo e invita a quedarse, tiene aire acondicionado, por supuesto, y conexión WiFi.
Un sabor que recomiendo: Kinder, con sabor al conocido huevo de chocolate.

Sorprendentemente, porque comería hasta mi casa, no soy super fanática del helado así que no soy de esa gente muy exigente. A nadie le gusta Grido y yo compro ahí si me queda de pasada. Pero estos helados me parecen realmente ricos. Nunca los termino y acá si, así que están bastante bien. De todos modos es una heladería a la que voy porque es linda y está frente a La Cañada. Vivo desesperada por lugares con árboles y aire así que me importa más eso que lo que voy a consumir. Me sentaría en un bar a comer barro para poder tomar un poco de aire. Bueno, no tanto.
Hace unas noches caminábamos buscando qué comer y descubrimos, yo no tenía idea, que acá venden comida también. Había una promo super barata de pizza y cerveza y nos sentamos. Cuando el fuerte de un local es el helado vos no esperás WOW SUPER PIZZA, es como ir a una ferretería y querer encontrar gran variedad en esmaltes de uñas, pero estaba realmente rica. Además es un lugar muy tranquilo, pocas mesas afuera, no hay mucho ruido, luces bajas y está bueno para ir de a pocos a picar una pizza a la tardecita. Una o catorce.

Casi todos saben que mi comida favorita es el helado. Es algo tan etéreo y lindo que parece haber venido de las nubes donde duermen las hadas más mágicas. Por eso, conozco muchos lugares donde venden helado.
Pero además de ser tan súper fan del helado, tengo una alergia suave pero rara a una proteína de la leche. Por eso, juzgo las heladerías no solamente por sus helados de crema, pero también por sus helados de agua. Ahora soy un poco menos estricta y como helados de crema un par de veces por semana, pero en una época era casi prohibido.
Brulatty es un oasis de helados y cafetería en la Cañada. Tiene mesas adentro y afuera, y una onda muy linda. Siempre hay gente tomando un café o helado o incluso almorzando cuando pasás por ahí, lo que muestra que es un lugar de calidad. Nunca comí nada más que helado ahí, pero la carta tiene cosas interesantes y ricas.
Tienen muchos sabores de helado en Brulatty, y muchos de agua. No tantos sabores como en Caseratto, pero lo que sí tienen es helado de agua sabor frambuesa. No te puedo describir la belleza de este sabor. Es una delicia total y cada vez que voy, pido frambuesa al agua.

Brulatty es un bar al que fui varias veces. Está ubicado en pleno centro de Córdoba y al frente de la famosísima Cañada.
Estéticamente es un lugar bastante bonito y cálido y tiene varias sillas en el frente (fuera del local) que son lindas de aprovechar cuando el clima es bueno.
Generalmente siempre fui a merendar. La atención varía mucho dependiendo de quien te atienda. Tienen mozos buenos y otros que no lo son tanto, pero asumo que esto para en todos los lugares.
Las últimas veces que fuí me sorprendieron los precios de la carta. Está bien que todo está bastante caro ultimamente, pero todo era un poco más caro de lo normal. Igual se come bastante bien, pero nada fuera de lo común.
Decidí no ir nunca mas a este lugar desde el día que probé sus helados. Creo que es prácticamente imposible que a mí no me guste un helado, pero una noche totalmente antojada de algo dulce decidí ir a comprar con un amigo. Sólo puedo decir que no pude terminarlo, creo que ni siquiera llegué a la mitad. Lo guardé en la heladera pero nunca más lo comí. Fue el helado más feo que probé en mi vida. Lo positivo fue que no volví a tener ganas de comer helado por un tiempo.