Malandrino es una pizzería exquisita que nada tiene que ver con las pizzerías de las grandes cadenas de comida rápida, todo lo contrario. Malandrino partió cuando su dueño italiano compro una antigua casona del cerro Alegre que estaba bastante deteriorada y después de dos años de restauración logró instalar aquí su pizzería que tiene la particularidad de preparar las recetas napolitanas de su pueblo natal. Cuando entras a Malandrino lo primero que llama la atención a parte de lo acogedor del ambiente, es el horno de barro que está a la vista de todos. Esto ya cambia todo el panorama más aún cuando te das cuenta que el horno utiliza leña para cocinar las maravillosas pizzas de Malandrino La masa es delgadísima y los ingredientes son precisos y livianos, la mayoría de los vegetales son orgánicos y provienen de la propia huerta del dueño, la salsa de tomate es espectacular. La carta tiene también otros platos italianos y una lista bien variada de vinos y cervezas artesanales, pero aquí lo imperdible son las pizzas al estilo napolitano, muy recomendable