Los cuchis, hasta ahorita me estoy enterando que se llaman así, ya que yo creo que todos los que vamos a consumir a este lugar las conocemos como el establecimiento donde venden papas zamoranas. Este lugar es un pequeño local, ubicado enfrente de la Universidad de la Salle, siempre había querido ir a probarlas, ya que me habían comentado que eran buenas, diferentes y que las salsas eran picosísimas. Así que decidí ir a probarlas, un día no entramos a clase de idiomas mis amigas y yo, y decidimos ir a este lugar. Unas papas zamoranas se componen de papa al horno partida en cachitos, en una bolsa, te le ponen churros, pepino, limón, sal y salsa a tu gusto. La verdad si lo estás leyendo aquí, pues los ingredientes a mi parecer no tienen algo espectacular, sin embargo ya juntos y comiéndolos son riquísimos. Pruébenlas.
Giovanni C.
Rating des Ortes: 5 León, México
Los Cuchis es el nombre oficial, sin embargo todo mundo las conoce como las Papas Zamoranas, se encuentran frente a la entrada principal del estacionamiento de la Universidad de La Salle Bajío, todo estudiante de la universidad debe de reconocer con facilidad este local. Este es uno de esos antojos de estudiantes que tiene éxito entre ellos y que no sabes bien como explicarlo, más que por el hecho de que en realidad esta rico. Aquí te sirven una papa cocida, después agregan churritos duros color café, después agregan pepino y jicama finamente picados en cuadritos y para terminar una capa de cueritos, después tienes la opción de agregarle salsa verde, otras rojas de un color muy obscuro, y chiles en polvo bastante ricos y picositos y con su buena dosis de limón, todo en una bolsita de plastico. Esta combinación te cuesta 28 pesos, por cada ingrediente que le quites sale más barato, 2 pesos menos, o si de plano solo quieres churritos te sale en menos de 20 pesos. En un principio yo no entendía porque a los estudiantes les gustaba esas famosas papas, no parecían tener nada especial, sin embargo al probarlas fue un encanto conocerlas, es de esas botanas que debes de probar para conocerlas y no juzgarlas por su apariencia(no me llamaba la atención una papa cocida…) sin embargo ahora voy muy seguido. El lugar tiene sillas y mesas de madera, hechas de una forma muy rustica lo cual le da un toque joven y divertido al lugar, los chavos atienden muy bien y son limpios, no reciben dinero directamente. Mi recomendación personal es que le pongan todo, pero que eviten las salsas rojas, si no será extremadamente picoso su pedido, me tomó aproximadamente 5 visitas encontrar la combinación perfecta, con todo, menos salsas rojas. Están muy llenonas, por 28 pesos, quedas satisfecho, demasiado. ¡Buen provecho!