El Maviri

El lugar tiene una vibra casual apta para Godinear/​crudear/​chismear con un par de cervezas, mientras se comparten varios platillos del mar.
La carta es extensa; cuenta con conchas, tacos, tostadas, platillos típicos sinaloenses, pescados, variedad de pulpos, alimentos al grill, etc.
El servicio fué muy atento, rápido, eficaz y efectivo. Me cayó muy bien el señorcito que nos atendió. Nos pusieron unos totopos sabrosísimos acompañados por diversas salsas.
La tostada de atún que pedí no me encantó porque la calidad del pez no era la mejor; estaba seco y algo difícil de masticar. Tampoco tenía suficiente mayonesa para contrastar la resequedad.
El caldo de camarón me gustó mucho en cuanto al sazón, consistencia y velocidad con la que apareció. No obstante, los camarones que tenía sabían a congelados. Me dieron ganas de usar un popote para tomarme el caldito porque con esas cucharas tan planas que nos dieron tardé una eternidad en terminarlo.
El taco de marlin con queso estaba muy bueno.
A mi prima le encantó su taco rebozado que se veía inmenso y vino acompañado de cebollitas cambray., me arrepentí de no haberlo pedido.

De un tiempo a esta fecha nos han invadido los restaurantes con sabor a Sinaloa, Nayarit o Sonora, así que El Maviri, llegó desde Sinaloa con su peculiar sazón, aunque el menú sea ido transformando poco a poco adecúandose a los gustos chilangos.
Mi favorito es el chilpachole con que te reciben, calientito, picoso y con sabor a mar, ¡Genial!; si no tienes problema para comer crudo, nada mejor que el aguachile de camarón, bien picoso con sus rodajas de chile verde (supongo que jalapeño), con pimienta, aceite de oliva y cebolla fileteada, con limón.
Si vas acompañado puedes pedir una «Charola Playera»: Machaca de camarón, machaca de marlín, chicharrón de pez, camarones al gusto acompañados de frijoles puercos originales, salsa molcajeteada, aderezo de chipotle y tortillas hechas a mano. ¡Yomi Yomi!
Los frijoles puercos tienen lo siguiente: Chorizo de puerco, jalapeños, queso, jamón del diablo y salsa ranchera. ¡Vaya bomba!
Además de una rica cerveza, nadie le cae mal para recoger la bilir y la grasa.