En esta ciudad uno puede encontrar ejemplos magníficos de arquitectura de primer nivel en los lugares más insospechados, incluido el Metro. Muchos nos quejamos de que las estaciones de nuestro subterráneo no tiene un diseño innovador como varias del sistema de París, ni tampoco son deslumbrantes, como las de Moscú, sin embargo, no todo es gris en el panorama, pues en la Línea 1(de color rosa, direcciones Pantitlán — Observatorio) existen tres estaciones con un diseño muy particular y formidable: Candelaria, San Lázaro y Merced. Las tres fueron realizadas por el arquitecto Félix Candela, firma que puede adivinarse por la delineación de los techos en forma de paraguas invertido tan característico suyo. De las tres, la única que aún puede admirarse libremente es Candelaria, pues San Lázaro se ha perdido entre las construcciones recientes del transborde, mientras que Merced se encuentra ahogada en medio del ambulantaje que la ha cubierto por completo. Muchas veces hay arte desarrollado en su máxima expresión picándonos la espalda, a la vuelta de cualquier esquina, pero la ajetreada vida que llevamos impide dejarnos admirar y valorar aquello que fue elaborado para deleite de nuestros sentidos.