Fried Ice

No habíamos entrado porque las veces que pasábamos estaba siempre hasta el queso! Ahora entiendo porqué: sólo dos mais medio fresones ochenteros –asumo los dueños– atienden, y el helado se hace en ese momento atendiendo los caprichos de quien lo ordena:
–Eh… Dame uno con Jagger, tequila, ron, fresa y ositos de gomita.-
–A sus órdenes!-
Y se ponen a echar todo en un vaso con base de soya y fructosa para luego licuarlo y vertirlo en un «comal» que abajo tiene un líquido a –40′.
Ellos no tienen ninguna nieve preparada, sólo los ingredientes y de ahí que cada preparación se lleve –fácil– 5 minutos.
No te dejes llevar por la cantidad de gente, o porque el lugar parece teletransportado de Calzada del Hueso, o que los colores y decoración como de 1995. La espera tendrá su recompensa. Precio por bola muy bien servida: 40 pesito.

Cuando leí la reseña de Actividad de Monica M. aquí en Unilocal me entró mucha curiosidad de venir.
El día que llegué por primera vez había una fila interminable y la verdad me dio la peor flojera, el lugar en sí no imantaba quedarse así que, mejor nos fuimos.
Ayer pasamos en bici por aquí y había una fila muy corta, fue el momento perfecto para probarlos.
Una vez que llegó nuestro turno pregunté que cual era el procedimiento para pedir nuestro Fried Ice y esto fue lo que me explicaron … A una base líquida de sémola de trigo y soya con fructosa le agregan los ingredientes que selecciones (entre muchísimos), los baten con una de estas batidoras de mano (las que tienen un brazo largo y se mezclan dentro de un vaso) y la mezcla que resulta la vierten en una plancha a — 40º.
El resultado es un delicioso helado ligero, lleno de sabor — obvio, me tragué cada uno de los malos pensamientos que tuve al no quedarme aquella primera vez que vine y me fui sin probarlos–
Hay diferentes precios y varían dependiendo de la cantidad de ingredientes que elijas. Nosotros elegimos: crema de menta (licor), chocolate semi-​amargo en barra y pistaches.
No pude evitar tomar foto a cada paso del proceso para poder ilustrar mi reseña.
Sí tienes oportunidad date una vuelta, date el tiempo y haz la fila interminable que seguramente habrá cuando vengas.

¡Me encanta!
No hay cosa que extrañe más de mi niñez que poder ir a la ciudad de los niños (kidzania) y hacer mi gansito o mi propia pizza. Así que cuando me entere de un lugar para grandes como yo donde podías hacer tu propio helado con TUS propias mezclas corrí a el.
Llegas y lo primero que ves ante ti es una barra llena de ingredientes para que sólo digas «este, este y este» y ¡pum! La magia se haga. Es como jugar con juguetes mi alegría.
La cosa funciona así: Escoges tus ingrediente, pueden ser lo más raro e incompatible del mundo, pero no importa es tu helado y tu imaginación, lo ponen en un tipo sartén que enfría a 40 grados centígrados y finalmente con una espátula lo despegan del sartén frío y te lo sirven en rollitos en un vaso.
Los precios son sensacionales:
sencillo con tres ingredintes 35 pesos
doble con cuatro bolas y sin límite de ingredientes 45 pesos
medio litro 60 pesos