La Cueva del Leon Lomas del Chamizal

La cueva del león es un clásico si lo que buscas es probar los tacos, aún cuando no podría considerar estos los mejores tacos de la ciudad, son bastante ricos, tienen buen servicio y están a buen precio. Este es un lugar al que puedes llegar a disfrutar de tus tacos a la hora de la comida o después de la peda, y tienen una variedad de opciones (casi como en cualquier lugar de tacos).
En lo personal disfruto mucho los tacos pero muchas veces suelo pedir los tacos light que son de pastor o bistek sustituyendo la tortilla con lechuga para comer de forma mucho más saludable. Considero que este es un buen lugar familiar y siempre podrán encontrar mesas disponibles. Aún cuando no es la mejor taquería, considero que tienen el mejor servicio a domicilio llevando un carrito para fiestas en las que hay varias personas que debemos alimentar.

Sobre la avenida que se ha convertido en una pasaje culinario, con incontables opciones para comer, la cueva de león es el favorito de varios. En lo personal la comida de la cueva de león no me paree nada fuera de este mundo pero vale la pena probar un par de inventos y aportaciones que han hecho al mundo de los tacos. Por ejemplo, a cualquier combinación de carnes le va muy bien una orden de salsa de Tahine, o sésamo (de procedencia árabe). Muy recomendables también son los tornillos; se trata de unas tortillas de harina más grandes que las comunes repletas de guacamole y con la carne de tu preferencia. A mi entender, pero puedo estar equivocado, fueron también ellos a quienes se les ocurrió ofrecer la opción de reemplazar las tortillas por lechuga para volver a los tacos ‘light’.
El lugar es bastante amplio y por lo general se encuentra bastante lleno y más aún conforme se adentra la noche. Sin embargo, cuentan con una zona para fumadores muy reducida en una esquina algo incómoda del restaurante.
*Tienen varias opciones Kosher, entrega a domicilio y servicio para eventos.

Como prueba de que es una buena taquería está que hace unos años se expandió a casi el doble de su tamaño. No puedo decir que el mejor pero sí es muy buena. Es del estilo de otras taquerías, con el trompo de pastor, agua de horchata y jamaica y la hoja de papel que te dan en vez de menú para que apuntes ahí que quieres.
El menú es el típico que esperas en este tipo de restaurantes con algunas inovaciones, como el volcán que es una tostada con queso derretido encima y mi favorito que es un taco en tortilla de harina enorme, con mucho aguacate y lo que quieras adentro de carne o verduras. Los alambres también son muy buenos. También las cebollitas de entrada y la costa de queso. A diferencia de otros, tienen además del pastor tradicional, tienen pastor de pollo para quienes no comen cerdo.
Fisicamente el lugar no es tan bonito, no tiene gran cosa de especial, pero es grande y siempre encuentras lugar. Abre hasta tarde y siempre es buena opción para esos antojos nocturnos.
Es casi imposible encontrar lugar para estacionarse en la calle pero hay valet parking.