Rectoría Ciudad Universitaria

Main administrative office building of UNAM, including the Dean’s office. Tourists can enjoy the outside only. Building was designed by Architects: Mario Pani, Enrique del Moral y Salvador Ortega Flores. All murals are by Davis Alfaro Siqueiros.

¿Qué se puede decir de Rectoria? es un edificio bellisimo y con muchísima historia, tanto cultural como de movimientos con y sin fundamento.
No es necesario tener que hacer algún tramite, sólo se puede pasear por los alrededores y disfrutar de las obras de esos grandes pintores.
Las áreas verdes al rededor siempre están muy limpias y muchos chicos las utilizan para relajarse, leer un rato o practicar algún deporte, como el otro día que fui a corres ahí en la carrera de los 3 Km al pasar por debajo el puente (el que une al estadio con rectoria) en esa área vi a un chico practicando danza aérea, fue sorprendente verlo, era el escenario perfecto: la luz, la rectoria, la gente, su perro y el trabajo que estaba haciendo. Obviamente después de la carrera regrese.

Diariamente paso por Ciudad Universitaria y mi parte favorita es donde se unen la Rectoría de la UNAM y la Biblioteca Central. Este conjunto arquitectónico, junto con sus jardines que te invitan a visitarlos sin oponer resistencia, es lo que distingue a mi ciudad como una de las más hermosas.
Pero más allá de la belleza, la Torre de Rectoría tiene su historia. Para empezar, se yergue ante nuestros ojos desde 1952, lo cual ya cuenta.
El muralista mexicano David Alfaro Siqueiros también dejó su huella en el edificio, el cual podemos apreciar más de cerca en uno de los costados. Es importante que sepamos que forma parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad, decretado por la UNESCO.
Y es que, ¿cómo olvidar las historias de nuestros padres que vivieron la huelga estudiantil de 1968 en carne viva? Por ello, la Rectoría ha sido testigo de transformaciones y algunos hechos importantes en la capital. Sin mencionar que es un estímulo a la vista.

Me gusta caminar por la explanada de Rectoría, siempre se ve tan pulcra (sobre todo en días soleados) y desde ahí luce mejor el edificio de Rectoría que se levanta imponente en el Campus Central.
Aunque no tengas que ir a hacer algún trámite, puedes ir a admirar los murales de David Alfaro Siqueiros. Uno está en el vestíbulo de la entrada (que dicen está inconcluso), y el más grande está junto a la torre de Rectoría. Se llama «El pueblo a la Universidad, la Universidad al pueblo. Por una cultura nacional neohumanista de profundidad universal». Sí, ese es todo el nombre, en el que puedes ver a un grupo de universitarios con herramientas escolares.
Si andas por ahí cerca, la explanada y cerca de Biblioteca Central son buenos lugares para detenerte y ver estos murales.

Como universitaria, no escatimo en la importancia de la Rectoría de CU y mucho menos su historia. Este emblemático edificio alberga gobierno, servicios y administración de la Universidad Autónoma de México.
Pocos saben que el edificio se encuentra en la zona más alta de todo CU y mide 59 metros de altura, y es uno de las construcciones más emblemáticas de la Universidad, junto con el Estadio, el MUAC y la Biblioteca Central.
Los arquitectos encargados de edificar uno de los símbolos de la universidad fue Mario Pani, Salvador Ortega y Enrique del Moral.
Los murales que podemos ver desde lo lejos que adornan el edificio pertenecen al consagrado David Alfaro Siqueiros, por lo cual la UNESCO lo nombró Patrimonio de la Humanidad el 23 de junio de 2007.
Son tres los murales que visten el edificio, uno de los cuales (el más conocido) recibe el nombre de «Las fechas en la historia de México». Los otros dos murales se titulan «El pueblo a la universidad y la universidad al pueblo» y «Nuevo Emblema Universitario».
Por su parte, en la parte más alta del edificio se encuentra el escudo de la Universidad.

En 1952 el célebre arquitecto Mario Pani, en colaboración son sus colegas Enrique del Moral y Salvador Ortega Flores, construyó uno de los edificios más bonitos y emblemáticos de la capital mexicana, la Torre de Rectoría que enmarca el conjunto de Ciudad Universitaria.
Lo más representativo de este edificio son los murales que lo adornan, creación de David Alfaro Siqueiros y fueron declarados en 2007 como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sin duda, un orgullo para todos los universitarios.
Medio siglo después, este edificio se conserva como la sede de gobierno, servicios y administración de la Universidad Nacional Autónoma de México; y aunque en la última década ha venido sufriendo diversos ataques hacia sus murales e instalaciones.
Mi opción para visitar este edificio, es una tarde en fin de semana, puede acompañarte de tu pareja, familia y hasta de tu mascota, pues los jardines aledaños al edificio son ideales para realizar un poco de ejercicio al aire libre.

La Torre de Rectoría y sus alrededores son el cerebro y corazón de la UNAM. Por sí sola, esta torre de 59 metros de altura, es imponente. Recorrer los tres murales, muestra del genio de Siqueiros, es una experiencia enajenante. El costado sur preserva la obra «El pueblo a la universidad y la universidad al pueblo»; el oriental, ostenta una interpretación del escudo universitario, «Nuevo Emblema Universitario». Por último, en el costado norte de la Torre, la obra «Las fechas de la historia de México», es, quizá, la más recordada, pues fue objeto de una modificación apócrifa durante la huelga de 1999, exhibiendo una de tantas controversias que han sucedido en el sitio. No olvidemos la reciente toma de la entrada, llevada a cabo por grupos demandantes y que duró aproximadamente un mes.
Fue declarada Patrimonio Mundial en 2007, lo que atrae a un mayor número de turistas, pero, el encanto natural de la zona, sólo lo percibe quien la habita.

Es el corazón de la UNAM. Lugar en donde se han dado reunión las más importantes grescas ideológicas. Punto de partida de varias marchas y manifestaciones que han sucedido a lo largo de su joven historia. Distintos movimientos estudiantiles (y no estudiantiles) la han tomado como estandarte.
Viéndola de frente, si uno desciende sus escaleras se encontrarán varios estudiantes de teatro de la FFyL ensayando sus obras, algunos estarán leyendo, comiendo. Eso entre semana. Los fines de semana es visitado por ex universitarios. Si se baja por las escaleras de la derecha se encuentra uno con la Librería de la UNAM, una oficina de correos, una papelería y los infaltables taquitos de canasta que venden en bicicleta. Al fondo se aprecia el Museo Universitario de Ciencias y Artes (MUCA)