Sabor Amor

Caro y muy inconstante en la calidad de sus alimentos. He ido en tres ocasiones y solamente en una he comido bien.

Un buen restaurante para ir a romancear, si buscas algo súper vintage este es el sitio ideal, la decoración de este restaurante es como ir a casa de la abuelita de «alcurnia» a probar unos tamales de pato o porque no unos grillos con queso crema, un poco raro? Si … Pero vale la pena conocerlo

Sabor Amor es una propuesta más en la colonia Roma que traen un concepto único y novedoso. Está en la calle de Álvaro Obregón donde se pone muy bien la hora de cenar y del precopeo. La dueña del lugar es la actriz Silvia Navarro y la verdad es que te hace pasar una experiencia agradable y saldrás muy contento.
No sabría explicarte la decoración porque cada salón es distinto uno del otro. La decoración está rarísima, cae entre barroco y kitsch. De noche si ilumina con varios colores. El restaurante está dividido en tres pisos, uno que parece algo elegante pero excesivo, otro salón que me recuerda a la mansión de la película Grandes Esperanzas donde todo el viejo, y una terraza muy agradable.
No podría faltar una coctelería original con diferentes ingredientes, una buena selección de vinos, café y té. Lo recomiendo para ir con amigos a cenar o a echar drinks, tiene muy buen ambiente.

Tuve la oportunidad de conocerlo el día que uno de mis grandes amigos cumplió años. Lo primero que me encanto del lugar (como la mayoría de las casas de la Roma) fue la fachada: tenía un aspecto un tanto como de casa de brujas, pero evidentemente cuidado y elegante a la vez. El servicio se lució al ser rápido y eficiente, lo que nos ayudó sin duda para pasar un rato muy a gusto. La comida que pedimos fue una delicia: la sopa, le entrada, el plato fuerte,… creo que fue uno de esos momentos de gula en los que te dejas hilar por el entramado de cada sensación. Aunque creo que los precios podrían ser un poco más amables con la cartera, el deleite culinario es un placer que no se le puede negar a ningún estómago cuando así lo amerita. No dejes de probar la cocktelería, recuerda que no hay nada mejor que acompañar una buena charla con un buen bocado y un buen trago.

Empezamos la experiencia entrando a una casa con arquitectura porfiriana, típica de la colonia Roma y su remodelación delineada de colores vivos con el letrero del restaurante que te invita a entrar. Por dentro la decoración sigue con la tendencia de colores vivos y te invita a un ambiente un tanto informal y relajado, donde las sillas de las mesas no son las mismas pero parece no importar. La planta baja tiene una decoración de manteles y vajillas un poco más elegantes que el primer piso, donde está mas iluminado y puedes ver jaulas de pájaros que encierran a luchadores de la AAA como decoración.
El tercer piso cuenta con una pequeña terraza y si deseas contratar el restaurante para un evento privado, hay un cuarto que se divide en un área para convivir con la gente y una enorme mesa de billar en la que te puedes divertir con tus amigos.
La comida es cocina mexicana con un twist moderno como el fideo seco de chipotle, y las albóndigas de camarón. Tienen muy buena selección de mezcales y sus drinks preparados son un verdadero deleite.
La buena atención, comida rica y ambiente hacen que los altos precios valgan la pena.

Uno de los restaurantes más ricos y bonitos de la ciudad, donde la casa parece de muñecas y cada espacio tiene detalles increíbles, este lugar es fabuloso para celebrar algo, la casa es porfiriana y tiene colores que hacen que te adentres en un cuento de niños, tiene un salón increíble que parece de algún multimillonario donde seguramente si estuviera ahí viviendo haría sus reuniones importantes. Y bueno si de gastronomía vamos hablar es totalmente mexicana pero con creaciones demasiado buenas que no creerías que lo que estas comiendo, son porciones gourmet y el precio pues como ya sabemos un poco alto pero totalmente lo vale, uno de los favoritos es el fondant de berenjena y queso de cabra, y ni que decir de las albóndigas de camarón y para acompañar uno de sus excelentes tragos, desde el más rico que esta hecho con pepino, mezcal y chile. Si lo que quieres es solo tomar algo deli el bar esta en el segundo piso. Así que si quieres sorprender a alguien este lugar es un must.

Ubicado sobre la avenida Álvaro Obregón, este restaurante, es uno de los lugares más bonitos y en donde mejor se come de la Ciudad de México.
Este lugar, me encanta por su flexibilidad, se divide en tres: en la planta baja, está el elegantísimo restaurante, en el que la comida es maravillosa y cualquier platillo es bueno. En la segunda planta, está el bar y en la tercera planta, está una cómoda terraza.
La carta de tragos, es bastante interesante, cualquier traigo que pidas, te garantiza ser un buen trago. También puedes pedir recomendaciones con base en tus gustos.
El ambiente, es bastante relajado y la música ayuda mucho a ello.
Este lugar, es uno de los mejores lugares de la ciudad de México.

Un lugar fantástico por la comida, la construcción donde está y la decoración. Te tratan muy bien, los tragos son buenos y la comida es estupenda. Es indispensable comenzar por el lugar físicamente. Ubicado en una casa de principio de siglo pasado, a a media de Insurgentes, que fue renovada con intención de saturar los sentidos con objetos e imágenes de lo más variopinto y multicolor. En las diferentes áreas encontrarás colores, tonos y muebles después de venir aquí queda perfectamente claro qué es «lo ecléctico». La terraza es el lugar ideal para platicar y fumar cómodamente. La comida es tan buena como los nombres de cada platillo: Los tacos de pato al pastor se llaman «Los Tentadores», de plato fuerte «El limón-​llito» pollo con setas y papas en salsa de limón y alcaparras. De postre, «El Franchute» fondant de chocolate sobre una espuma de mezcal acompañado de helado de vanilla.