Tortería Royalty

Tortas exquisitas, caseras, un poco chicas
Un poco cara $ 35 por torta q un mortal normal se come 4
También hay quedadillas
El Sr que atiende aparte de eficiente y servicial es muy simpático
Invitados a volver

Después de probar todo tipo de platillos en Polanco, un día quise entrar a Royalty para comer una torta y comprobar si eran tan buenas como me habían dicho. Lo mejor es que no me decepcionaron, aunque para ser sincera estaba acostumbrada al tamaño jumbo, pero quedé satisfecha.
Estas tortas son más bien caseras, así que encontrarás las típicas de jamón con queso, aguacate, milanesa y otros manjares que a los mexicanos nos encantan. Claro que no podían faltar los chiles en vinagre para acompañar y tu refresco, con lo que completas el cuadro.
Mis favoritas son de chicharrón de pavo o pollo con mole para que valga la pena la visita. Si te queda un hueco, puedes pedir un consomé de pollo.
Este local es muy tradicional y ha durado varias décadas en el mismo lugar, así que no te lo puedes perder.

La torta clásica, y con esto quiero decir la casera, bien hecha.
Las tortas royalty son de tamaño normal, no son mega tortas súper tortas, así que tendrás qué comer unas 2. Mis favoritas, y al parecer la especialidad de la casa, son las de bacalao y la de pavo sencillamente deliciosas. Claro que si eres más tradicional, también tienen de milanesa, de jamón, de pierna, etcétera.
Si eres un verdadero valiente no puedes dejar de probar los chilitos habaneros en vinagre que ofrecen ahí para acompañar tu torta: son mitades de habanero en escabeche, te pondrás una deliciosa enchilada.

Este lugar me lo recomendó mi papá, esta tortería lleva toda la vida aquí. Es de esos lugares, que solo por antigüedad son excelentes. El menú es el típico que se esperan: Tora Cubana, de milanesa, de pierna, de tres quesos, etc. Pero, se me hace que es el amor que le ponen al prepararlas lo que las hace tan buenas. No escatiman en el aguacate, los frijolitos, el jitomatito, etc. Y tienen una excelente selección de salsas.
No son trotas tan grandes, así que no necesariamente van a acabar con el mal del cuerpo. Y pues si se quedan con hambre pidan otra, pero de algo más, vale la pena probar todo.