Don Chupas

Honestamente no son los churros y papas caseros mas sabrosos que encontraras (las manitas aun no las pruebo), pero te aseguro que te divertiras viendo como se enchilan tu y tus amig@s, ya que el chile que aqui preparan no lo tolera ni el mismo chamuco.
Sin lugar a dudas son toda una tradicion en mi rancho.

Business run by family since 25 years ago maybe more, original owner past away but his legacy still lives on, best corn sticks and pork skin you ever tried, if u like hooooooot and spice this is the place to go, but be careful what u wish for their hot sauce is made whit BLAZING HOT RADIOACTIVE LAVA, only the strongest will survive, use to come here wen I was a kids, took my 16 year old to tried then and he took it as a man, defenetly a experience he will remember for ever, just like I did 25 year ago!

Adiós sueño en el trabajo!!!. Nos tocó hacer horas extras en el trabajo, y la verdad es que el primer día como si nada, todo muy fresco. Más bien lo resentimos en el tercer día cuando nos dimos cuenta que no podíamos quedarnos despiertos.
Hasta que se me ocurrió llegar con una arma ultra secreta, algo que por nada del mundo te va dejar dormir. Los churritos de ´´don chupas´´, y eso que no le pusimos la salsa, hasta nuestro supervisor que es de colima y que le gusta a todo poner picante, lo hizo llorar de lo enchiloso.
Si tienes pensado viajar y manejar a la vez, te recomiendo una bolsita con un botecito de salsa tienes para el viaje. Pero si la idea es ir a beber, no hay pierde con estos churritos van a ser la sensación de la noche y es que el chile que tiene los churritos te pica a tal grado que te hace seguir comiendo.

Los churritos hechos con la mejor y más ejercitada gracita del cerdo, caseros, crujientes, con muchísima salsa y limón (pá que no te sientas tan culpable, los cochis son 100% orgánicos).
Este lugar esta un poco retirado de donde vivo pero vale bien la pena recorrer media ciudad para ir hasta donde esta Don Chupas (QEPD) e ir por una bolsita de churritos preparados con la salsa que preparan ahí y a montones.
Lo mejor de este lugar es que no hay solo una recomendación, sino varias. Esta la campechana que es un plato de papitas preparadas con churros, cueros, pepino y toda salsa que quieras.
También esta el San Casteavro que son churritos preparados con pepino, cueritos y muuucho chamoy (en estos momentos tengo un vaso bajo mi barbilla para contener la saliva).
Si eres chucuhluquero de corazón, y al igual que a mi, te baila la lombriz nomás de pensar en cochinero y medio, entonces visita a Don Chupas y no te arrepentirás.
PD. también prepara patitas de cochi.

Tradición en botanas. Negocio familiar y receta secreta en una salsa que enchila no sólo la lengua, sino hasta la nariz y los dedos. Aunque no hay más sucursales, y el puesto es pequeño, no creo que haya alguien que no conozca los churros de Don Chupas.
Los churros de este señor se han convertido en un desafío entre los jóvenes, quienes tientan al destino y a la gastritis con este picante intragable y sus variaciones dignas de toda una linea de salsa de botella. Los churros podrán ser los que sean, pero reconocerías su salsa en cualquier botana. Cueritos, chicharrones, papas fritas y churros.
Si te atreves, ten cuidado de dos cosas: no tener heridas en los dedos, no frotarte los ojos o la nariz (la cara en general), y lavarte las manos antes de ir al baño. Con mucho jabón y agua. Si no aguantas la lengua, te lloran los ojos y no puedes respirar al terminar los churros, no quiero saber qué pasaría si no sigues mi (s) último (s) consejo (s).

La adolescencia es la mejor etapa de todas.
Es la etapa donde más energía tienes para hacer cualquier cosa.
Tienes que cansarte, no podrás volver a esa etapa nunca más. Puedes seguir siendo listo, divertido, guapo, enérgico y demás cosas, pero nunca todas juntas.
Durante esa etapa empiezas a madurar y a separar lo que aporta al largo plazo.
Antes de conocer lo que aporta y lo que no, conocí el lugar llamado Don Chupas. El lugar es popular porque la salsa picante que hacen es tan picante que los ojos te lagrimean si te acercas a ella. En su momento no lo sabía, pero estaba haciéndole un daño tremendo a mi cuerpo. No lo haría de nuevo, no soy ese tipo de persona,
No te recomiendo que vayas. Te recomiendo que te cuides en todos los sentidos, y eso amigo, incluye tu salud.

Quien no conoce los Churros Don Chupas no puede llamarse un tijuanense 100%, pues este señor estuvo años en el mismo lugar, después de su dolorosa partida tras tanto tiempo de atender este pequeño negocio y de haber sido tan frecuentado y mencionado por todos los jóvenes, no solo de la colonia, sino que también de toda la ciudad, pues hasta la fecha no he conocido a alguien que no haya probado los churros, o por lo menos, escuchado de este famoso changarrito en la ciudad, desde que iba en la primaria, en la secundaria y en toda mi vida estudiantil era una tradición ir por unos churros de don chupas.
Hoy en día es su hijo el que atiende el puesto, quien heredo la receta de su padre para preparar esas salsas conocidas por estar repicosas y si no me crees ven para que las pruebes, te va salir humo asta de las orejas.

Si, quién no recuerda a «Don chupas» en la colonia rio parte baja, este señor se volvió en un reconocido personaje nada más y nada menos que por la salsa de sus churros, Ah y aparte como dirían por ahí, ¡hay niveles! Hasta en la salsa quien lo diría. 1,2 o 3 si el primero ya sientes arrepentirte de todos tus pecados, ahora el 3, te hace llorar lágrimas de sangre diría mi papá. Todo tijuanense que los haya probado, sabe de lo que hablo.
Por qué era tan famoso, porque entre otras cosas aparte de vender los churritos, cueritos y patas de puerco que te puedes preparar como se te antoje, tomas la salsa que más aguante tu paladar. El local es una casa de madera con una ventana, por lo que no cuenta con un amplio estacionamiento, puedes tomar toda la calle.
Lo lamentable es que hace poco Don Chupas falleció, pero dejo a Tijuana su secreto por medio de sus hijos, esas salsas que no puedes dejar de probar, aunque sea la más enchilosa que hayas probado en toda tu vida. ¡No te arrepentirás, prueba esos churritos!

Los churros que se hicieron legendarios en esta ciudad, Don Chupas. ¿Qué tienen estos churros que te hacen querer comerlos a todas horas del día? La verdad desconozco por qué son tan adictivos. No importa qué tan enchilado estés, siempre quieres más, casi casi diciendo que el próximo ya no te va a picar tanto aunque el resultado sea todo lo contrario.
Es gracias a sus churros como Don Chupas se convirtió en todo un personaje muy querido por sus clientes y el día que falleció, se sintió la pena entre todos los amantes de sus churros, recuerdo que cuando los pedías, te preguntaba, «¿Qué tan picante, 1, 2 o 3?» Con el 1 ya te enchilabas bastante, ahora imaginen el 3.
Estos churros le fascinan tanto a un amigo, que el estudiar ahora en la ciudad de Mexicali no es impedimento para él porque como viene cada fin de semana, el domingo se va a surtir de su dotación semanal de Don Chupas. Pruébalos e intenta no hacerte adicto, es un reto que difícilmente podrás ganar.

Posiblemente una de los más grandes secretos de toda la ciudad.
Sabia por unos amigos que es un local donde venden frituras con salsa, que en lo personal no soy fan.
Un día, algunos compañeros de la facultad nos pusimos de acuerdo en ir después de clases. En primer lugar nos perdimos ya que si está un poquito difícil encontrarlo.
Al llegar me quede decepcionado ya que era un local muy feo, la fachada a punto de caerse y el «Don famoso chupas» sentado afuera descalzo en camisa de tirantes rota con una Tecate roja.
Paso por mi mente no pedir nada, y solo platicar. Y de la nada paso un automóvil de modelo reciente, se estaciona justo en frente y sale una señorita con ropa de oficina, saluda al hombre y pide su orden de tres bolsas de producto.
La curiosidad me mato, y compre tostitos con salsa «que no pica». Y solo déjenme decirles que necesite de una botella de agua, sal, dos clamatos y no recuerdo que más para poder quitarme lo picoso.

¿Quién que vive en Tijuana no conoce los churros de Don Chupas?
Éstos churros son famosos por el sabor y lo picosa que es la salsa del señor conocido como Don chupas que es el que la creo. Es la salsa más picosa que podrás comer en tu vida, más que el habanero, chiltepín, etc. Nunca había probado algo tan picoso.
Es un puesto pequeño y humilde, pero está bien surtido con papas para botanear, cueritos, sodas y por supuesto los churros. Éstos churros antes el señor los hacía, desconozco si sigue siendo así.
A pesar que el señor falleció hace poco, se difundió el rumor que «Don chupas» cerraría y muchas personas se alarmaron por que acuden con regularidad al lugar, pero la familia del señor decidió seguir con el negocio que el comenzó. El hijo del señor ahora se encarga de preparar la salsa y los churros que es por lo que era muy conocido el dueño del establecimiento.
Si eres amante de la comida picosa y no conoces éstos churros te recomiendo que lo hagas ya que el sabor es muy bueno y aunque la salsa sea muy picosa te pasará como con las Sabritas, no podrás comer solo uno.
¡Ah, sí! Y como recomendación lleva contigo una botella de agua o un refresco por qué lo necesitarás.

Todo estudiante de UABC tuvo que comer unos churros de don chupas y si no lo conociste no fuiste un buen estudiante. Don chupas es famoso no por preparar las mejores botanas sino por ser todo un reto para el paladar y la panza, las salsas preparadas por el mismo son dignas de cualquier reto ya que son casi imposible comerlas.
Entre las cosas que vende son churritos, cueritos y patas de puerco que puedes preparar con tu propio estilo, eligiendo la salsa que más te convenza. El lugar es una casa con una ventana de madera por lo que el estacionamiento es sobre la calle.
Los precios son realmente baratos, lo que probablemente te saldrá más caro es el pepto bismol. Si un día estas muy aventurero y quieres poner a prueba tu acidez estomacal, visita la casa de Don Chupas que es toda una sensación para la comunidad estudiantil.

Lo digo yo y lo dirá todo tijuanense que los haya probado, los churros de Don Chupas son los más enchilosos de todo Tijuana, te enchila tanto hasta llorar, llega a ser hasta un acto paradójico, ya no puedes y no quieres pero necesitas más y sigues comiendo, y es que en realidad no son sólo los churros, también los cueritos, y es que el secreto está en la salsa que ahí mismo hacen.
Recuerdo que hace muchos años, en mis tiempos de mucha fiesta, íbamos a comprar cueritos de Don Chupas para botanear y bajar la cruda, la verdad es que la resaca desaparecía en el instante y jamás conectábamos de nuevo la «fiesta» ya que la enchilada nos ganaba a todos y terminábamos derrotados.
Lo triste es que recientemente Don Chupas falleció pero dejo en Tijuana su legado, la salsa botanera más enchilosa que he probado en mi vida.