Miguelito

Si andas por el entorno de la Mezquita de Córdoba y estás un poco harto de la saturación turística y de encontrar llenos los bares de la zona, te recomiendo visitar este lugar.
Tan sólo hay que cruzar el puente Romano, que ya de por sí merece el paseito, para toparse a los pocos metros con este bar que aunque por la apariencia no lo parezca, guarda una buena cantidad de sorpresas en su carta.
El sitio principal para comer es un gran velador que tienen en la puerta, que protegen con una carpa de plástico cuando hace frío, ideal para tomar el fresquito en verano. Estuve hace poco y no se está mal ahí, pese a que haga frío fuera instalan estufas suficientes para que se esté cómodo dentro.
Pero lo importante es la comida, obviamente, y de ella, señalo como estrella el «Buchón»: Una suerte de flamenquín cordobés, pero hecho con merluza en lugar del jamón tradicional. No te puedes ir de allí sin probarlo. El resto de platos, pescados excelentemente fritos, y carnes están a la altura.
En definitiva, un buen lugar para pedir la típica comida andaluza-​cordobesa, sin dejarse la cartera en el intento y a un paso del casco antiguo de la ciudad.

Este local al lado del río y de los emblemáticos, Puente Romano y La Calahorra. es un lugar recomendado, para hacer una paradita, para proseguir recorriendo la parte más significativa de mi Córdoba …
Por si os interesa La Calahorra es visitable, sobre una hora tarda el recorrido .
Y de las tapas de este local, (que por cierto cierra cocina a las 4. o sea perfecto por si te has entretenido por las callejas) … es mejor ir probando y subiendo fotitos.

Establecimiento con solera datado de 1945. Su sustento se originó en el típico vinito d la época que los obreros de la zona se tomaban al salir del tajo. Las sucesivas renovaciones han conseguido mantenerlo en el tiempo hasta nuestros dias, convirtiendo en un punto de referencia de los cordobeses de la zona. Precios económicos. Cocina muy recomendable.