Horroroso. Pizzas mas malas que las que me hacia en casa con 15 años y con lo que habia en el frigorifico. Solo valen las vistas.
Moilafille M.
Rating des Ortes: 3 Sevilla
De última hora reservamos aquí para la comida de navidad del trabajo. Menú apañao por 20 € y amenizado con numeritos musicales a cada rato. La comida, por lo menos de menú, da bien cantidad — precio, pero de calidad simplemente aceptable. No sé cómo será comer de carta. Para un desavío y sin ser exigentes, puede pasar. Tendría que venir otra vez para decir otra cosa.
Olalla R.
Rating des Ortes: 2 Sevilla
Les habíamos prometido a mis hijas ir a cenar antes de empezar el cole al Oh! Mamma Mia. Solemos ir a este establecimiento en Cádiz y decidimos ir esta vez al de Sevilla. Nuestra sorpresa fue que ya no existe, no sé desde cuándo, pero ya no está el típico Oh! Mamma Mia de toda la vida de la calle Betis. Como se trataba también de un italiano decidimos probar. Aprovechando obras en la calle y que estaba cortada al tráfico muchas mesas ocupaban la calzada, una amplia terraza con todo ocupado, así que nos sentamos dentro del local. Han mantenido parte de la estética antigua pero con un lavado de cara para salir del paso, muy poco acorde con el resto(para mi gusto y el de mi marido), con losas rotas en el suelo, baños antiguos, parches de arreglos en algún lado… Respecto al servicio pues… Bueno… Servían rápido, pero con fallos, en mi opinión, importantes. Como, por ejemplo, el interior de un vaso sucio del que me dí cuenta a la mitad de mi cerveza, lo comuniqué y se lo llevaron, lo dejaron en el mostrador y nadie se preocupó hasta que lo dije cuando vinieron a ofrecernos el postre. O ese carrito junto a la mesa del que cogían el menaje para las mesas con un ruido que llegaba a ser muy molesto o las voces de los camareros a veces riñendo(o esa impresión daban). La comida no estaba mal, pero tampoco nada del otro mundo. Sacaron unos espaguetis prácticamente sobre la marcha y templados, que cuando luego volvimos a pedir otro plato igual, tardó mucho más y llegó humeante, vamos recién hecho. Postre no pedimos, preferimos marcharnos de allí. Si lo resumo de alguna forma, la mejor sería: no vuelvo a ir y tampoco lo recomiendo.