Coffee House

Un lugar coqueto en una zona que aparentemente no tiene demasiadas opciones. Llegamos a almorzar una mañana que estábamos visitando a un amigo de la zona y la chica nos atendió muy amablemente. Había varias opciones para bocatas y tostadas pero fuimos tradicionales: tostadas de tomate con queso, cafés y un zumo natural. Todo estaba rico, el local es muy agradable y bien decorado y me quedé con las gana de probar uno de esos fantásticos batidos a buen precio que asomaban en la carta.
En concreto quedé prendada de uno dirigido a atletas y que llevaba un 20% de proteínas, además de frutas y cereales. No es fácil encontrar sitios donde hagan mezclas tan originales así que me gustó la idea y sin duda si estoy por el barrio pasaré a catarlos.
Tiene terraza, aunque era finales de julio y no osamos pisarla.