El León

A tenor de las reseñas vistas nos decidimos por probar este restaurante ubicado en una zona emblemática de Valencia. Craso error en no fijarnos en la fecha de las mismas. Mucho ha cambiado. Nos recomendaron el menú degustación, 4 menús para 6 personas exactamente, porque tendríamos bastante. Pero no puedes ofrecer un menú degustación para 2 personas que conste de 4 miniplatos y un micropostre. (Es verdad, también, que es «degustación», pero por 19 € por persona, bebida aparte, se puede ofrecer algo mas amplio, y no me vale decir que es «cocina de diseño», en este caso no. En fin, mala experiencia, otra vez sera.

Truly amazing meal. Everything was delicious, with amazingly fresh seafood, and perfectly executed dishes. A true gem!

The service was great and so was the food! We ordered a wide variety of food; steak and chips, hamburger, tapas, crispy chicken salad. My favorite was the little peppers. They looked like Shisito peppers which is one of my new favorite appetizers. The steak was also very well cooked. I asked for medium and that is exactly what I got! The atmosphere was also wonderful, we sat in the alley next to the restaurant and had a lovely cool breeze. I would definitely recommend this to anyone visiting Valencia and looking for an affordable quick place to grab some food.

Ein nettes kleines Lokal direkt an der Plaza Redonda mitten in der Altstadt — und im Vergleich zu umliegenden Bars auf jeden Fall etwas preiswerter!
Es gibt ein leckere Tapas (Patatas bravas, Sardinen, Tintenfisch-​Kroketten…), allesamt frisch zubereitet und mit einer besonderen modernen Note (z. B. gibt es zu den Patatas bravas nicht die übliche Knoblauchmayonnaise und eine ketchupartige pikante Sauce, sondern eine mildere Knoblauchcreme und ein scharfes Möhren-​Tomaten-​Püree).
Neben den Tapas, die besonders gut zum Teilen geeignet sind, stehen auch einige Fleisch– und Fischgerichte sowie Hamburger und vegetarische Alternativen zur Auswahl.
Das kühle Bier oder das Glas Wein zum Essen sind hier auch nicht überteuert wie in vielen anderen Lokalen, sondern preislich in Ordnung und auch geschmacklich super (gerade die Qualität des offenen Hausweins lässt andernorts sehr zu wünschen übrig!).
Auch das Frühstücksangebot (Kaffee + Croissant + auf Wunsch Orangensaft) ist günstiger als in vielen anderen Cafés im Zentrum.

We tried El Leon for lunch and it was one of my favorite experiences in Valencia. Their food is just so delicious! We had the amazing croquettes, the phenomenal eggplant carpaccio, and my friend’s steak was so good! I even left my water bottle by my seat and the owner was quick to respond to my Facebook message and held it for me to pick up after their siesta period. I was really impressed by his quick response and friendly nature. Kudos!

Un restaurante mayusculas agradable. Estábamos en vacaciones en Valencia y queríamos probar una buena paella valenciana. Hemos elegido este bar a tapas/​restaurante. Esta en una pequeña calle cerca de la plaza de la reina. Muy calmo, esta bien para descansarse un poco.
La comida esta fresca, con productos locales (del mercado probablemente). Los précisó parecen un poco elevados para la ciudad.

Loved the restaurant and the little placa it is located at.
We’ve really enjoyed the eggplant carpaccio and the vegetable croquets. Also the patatas brava are a bit different, but delicious.
We liked the food so much that we’ve decided to spoil ourselves with dessert: carrot cake. Which, obviously was a real treat.
If you’re a vegetarian like us you’ll find plenty of your liking.

Pues… ya volví a probar esas hamburguesas, y he de decir que la fama que tienen es merecida. Una cenita ligera y muy sabrosa, especialmente suculenta. Probamos dos de las especialidades y salimos muy satisfechos. Jugosas, con sabor y bien cocinadas.
Vamos, que lo que había escuchado de este sitio se corrobora.

Llegamos a este bar confiando en la recomendación de otros Unilocalers, y fue un acierto total. Pese a ser un grupo numeroso, nos acomodaron rápido y nos atendieron muy bien.
Para empezar, por hacer check-​in, el camarero nos obsequió con un aperitivo de boquerones en vinagre con pimiento y cebolla asada. Riquísimo.
Yo probé la tapa de calamar con ajo blanco (3 €), la ensalada de langostinos con aguacate, tomate seco y tofunesa de cítricos (8,50 €) y la hamburguesa de ternera especial con extra de berenjena al fuego (8,50 €). Todo muy bueno, aunque la tapa de calamar fue lo que más me gustó. Mis amigos pidieron otros platos de la carta y a todos les gustó. Lo único que no probamos fueron los postres, pero tenían muy buena pinta.
El precio de este bar es muy bueno, más bajo que otros bares de la zona, y la calidad de los platos es mayor. Los preparan al momento y se nota que los ingredientes son de primera calidad.
Resumiendo, buena carta, buenos precios y buena atención.

Coquetón.
Un sábado por la tarde después de dar vueltas y vueltas por el centro de la ciudad, decidimos tomarnos una cerveza y descansar un rato. Estábamos cerca de la Plaza Redonda, así que decidimos entrar en este local. Algún que otro Unilocaler nos lo había recomendado. Me pedí una Alhambra 1925. El local estaba vacío. Eran cerca de las 20:00 h. El local es pequeño. Ideal para parejas o para grupos de 4 personas. Más, será complicado, aunque no imposible. Estuvimos tan a gusto que pasado un buen rato y viendo la carta que teníamos a mano decidimos quedarnos a cenar.
La decoración es uno de sus puntos fuertes. No sé porque algunos locales olvidan que la comida, como casi todo en esta vida, entra también por los ojos. Y un entorno confortable y agradable ayuda, y mucho, a que la experiencia de degustar platos sea más satisfactoria. El León tiene esta faceta superada.
La carta es breve, pero tengo que reconocer que de lo que hay lo saben hacer bien. Yo me pedí una hamburguesa, hay de varios tipos. Pude constatar que estaban ricas, la carne estaba en su punto y sabrosa. Como debe ser. Mi mujer se pidió pescado y me comento que estaba bueno (ya leeréis su reseña). Los postres también estuvieron a la altura de todos los demás. Así que es un local, que sin grandes pretensiones, tienen una carta breve pero bien hecha.
Destacar que el servicio fue muy cercano, amable y atento. Sin duda repetiré. Hay dos o tres variedades de hamburguesa que no las pienso dejar escapar.

Una carta sencilla repleta de sabor creo que la cualidad principal de este lugar.
Solo he ido en dos ocasiones y siempre entre semana.
La primera, éramos los únicos en tan diminuto restaurante y la segunda vez había solo una mesa más ocupada; Así que evidentemente el servicio me parece estupendo y no puedo quejarme por el espacio porque me senté «a mis anchas».
La primera vez me sorprendieron gratamente con un menú del día por 9 euros. Comencé con una ensalada súper buena de lechugas variadas y panceta con un aliño de mostaza y miel. De segundo churrasco y para rematar un postre híper casero: pan de calatrava.
El menú es buena opción por el precio y porque esta buenísimo…pero las porciones son algo «pequeñas» así que si llegas a ir con hambre definitivamente es mejor que elijas de la carta.
La segunda vez me decante por una «hamburguesa fresca» ‘¡MMMMMM!!! Ternera de lechal con aguacate, tomate seco y queso fresco. No saben que placer es la combinación de la carne con el aguacate, la súper recomiendo, ahhh y las siempre fieles compañeras papas fritas también estaban espectaculares.
Definitivamente tendré que ir muchas veces más para «consentirme» con cada una de las diferentes hamburguesas que tienen y pedir también uno que otro Gin– tonic ya que presumen de tener los mejores de la ciudad.

La palabra casero a veces se utiliza con demasiada facilidad en bares y restaurantes, y luego te llevas un chasco importante. Sin embargo, en El León ese adjetivo es el que realmente define a lo que luego consumes. No dejéis de probar las croquetas de sepia, setas o las vegetales. Simplemente espectaculares. Las hamburguesas más de lo mismo, 100% caseras, al igual que los postres. Además, al estar en la plaza redonda podéis soltar a vuestros «leones» a la plaza para que disfruten el espacio. Ahh! Se me ha olvidado decir que la atención y la amabilidad de la chica que nos sirvió fue excepcional. Resumiendo: 100% RECOMENDABLE

Después de ver en Unilocal unas fotos de unos deliciosos platos tan bien presentados, no podía fallar a hacer la cata en mis propio estómago, y acertamos. Este pequeño restaurante, se encuentra en uno de los locales que han dado una vida nueva a la Plaza Redona de Valencia. Tras su rehabilitación os puede gustar más o menos cómo la han dejado, pero la historia la lleva adherida en cada piedra. Pasearse por allí me trae siempre recuerdos a cuando iba de pequeña con mi padre, el bullicio de gente y animales vivos hablando cada uno en su idioma, todo bastante caótico.
En 2014 la cosa se ve bastante diferente y algunos de los antiguos negocios de tejidos y bordados tan típicos de esta plaza se han reconvertido en nuevos negocios, es el caso de El León. La reforma s ha elaborado con mucho gusto y es muy agradable, si bien un poco limitado en espacio.
Llegamos a comer un sábado y teníamos reserva para cuatro. El local estaba lleno y con un carro de bebé era un poco complicado colocarse sin molestar a nadie y estar cómodos, lo conseguimos pero costó lo suyo. Después para desdoblarnos y salir al servicio (también minúsculo) tuvimos que emplear toda la elasticidad que nuestros cuerpos treintañeros disponen, que es algo pero no demasiado. Tienen una carta muy apetecible y sobre todo diferente, es decir es cocina mediterránea con un toque muy especial. Rico, fresco y apetecible es lo que me viene a la cabeza cuando recuerdo mi experiencia allí. Empezamos con unas tapitas de jamón cortesía de la casa cuando hacías check-​in con la aplicación de Unilocal,no sé si seguirán teniendo la oferta, ya sabéis que esto puede ir variando según época del año y decisión de los dueños del negocio.
El caso es que la entrada ya fue agradable y después de lo que pedimos, todo nos encantó. De primero unas ensaladas de cítricos muy frescas, después había lasaña de verduras o ratatouille, si no habéis probado esta delicia francesa que se ha hecho famosa por el ratón de la película de dibujos ¡tenéis que probarlo! Es realmente delicioso y aquí nos lo sirvieron muy fresco y hecho con amor.
De postre una tarta de zanahoria y jengibre nos hizo saltar las lágrimas. Que sepáis que es todo casero, que la carta es extensa y tienen hamburguesas vegetales (de mijo), tostas integrales y toda una serie de platos hechos con ingredientes naturales y frescos, pero sobre todo: bien cocinados.
Una amiga y Unilocaler, Irene C (gracias a la cual conocí el lugar), es amiga a su vez del cocinero francés que ha estado hasta ahora, aunque parece ser que éste se ha montado un restaurante (ya me he enterado y tengo que ir, jeje) y se ha dejado la cocina de El León para embarcarse en su propio barco. No dudo de que Sergio (el chico que lleva el restaurante e hijo del antiguo dueño de la tienda de bordados) habrá encontrado a alguien que esté a la altura, porque realmente cuando nosotros fuimos valía mucho la pena.
No por estar en un sitio turístico hay que pensar que te van a clavar, la cuenta fue de lo más asequible por una comida muy buena y nada convencional. Le deseo mucha suerte con la nueva etapa y ya tengo ganas de volver para ver las propuestas del nuevo cocinero. Si le tengo que poner un pero al sitio es el espacio, no muy recomendable para mesas grandes de grupo o familias con carros y niños.

Un sitio muy agradable para ir a comer o a cenar. Muy tranquilo, excepcionalmente situado y muy relajante. Comer en la plaza redonda la verdad es que es una pasada. Tanto rollo que hay en Valencia con el puerto de la copa américa y la fórmula 1… nada comparable al privilegio de poder comer en un sitio como este. Eso sí, conviene tener en cuenta que no tienen muchas mesas, así que mejor reservar.
Dos parejas y un bebé, un menú de fin de semana a buen precio y una comida tan fuera de lo común como exquisita: Ensalada de champiñones y bacon, ratatouille con pollo y arroz o musaka de verduras con soja texturzada y tarta de café o de zanahoria casera. Todo estaba muy bueno y cocinado en su punto.
La atención fue buena aunque escuchamos que lo que no estaba en el menú tardaba un poco en salir.

Franck y Sergio son dos chefs de largo y provechoso recorrido así que cuando me anunciaron que se disponían a apostar por un negocio propio me alegré mucho puesto que la calidad y la impronta personal estaban aseguradas.
Para empezar la ubicación ya es toda una delicia, la particular Plaza Redonda, y el restaurante, antiguo comercio valenciano del padre de Sergio, ha sido rediseñado minuciosamente.
Su planteamiento viene a intentar conjugar varias cosas: la oferta turística, la oriunda, la tradición y la innovación. Todo ello con el sustento de la buena materia prima.
Franck nos prepara desde una deliciosa paella de pollo y conejo a una hamburguesa de mijo, lomo relleno al horno o un cous cous vegetal. Y los postres… fantástico pastel de queso o de naranja… Podéis ver algunos de estos platos en las fotos adjuntas.
Tienen distintos y variados menús de grupo y diariamente uno de mediodía por 9 euritos, incluido el fin de semana.