S’alat Bar i Botiga

Ha mantenido el local de La Pinça incorporando poductos mallorquines, pero no lo típico sólo, sino limonada casera, sus cocarrois y panades (como los flaons de Morella por poner un ejemplo), sobrasada y ensaimada en temporada, y la «pomada» también.
La terracita interior es muy fresca incluso en pleno julio, así que se han ganado clientela de tarde casi fija.
Echadle un ojo orque seguro que os lleváis algo.

Un trocito de Mallorca en el barrio de Ruzafa! BIEN!!!
El local es amplio y fresco, con un patio interior que emula las casas mallorquinas.
Su cocina es sencilla pero con productos de primera calidad, sonde destacaría su coca de calamares que es espectacular. Además tienes una gran variedad de bebidas típicas para probar, como la Pep Lemon, que a mi personalmente me encantó.
El trato fue muy agradable y el servicio bastante rápido.
Pero este local también ofrece productos de venta al público, de ahí su nombre: S’Alat bar i botiga, donde los amantes de las islas podrán adquirir los productos típicos mallorquines, sobrasadas, ensaimadas, una pomada, la estupenda pep lemon y muchos productos más que no describo para que vengáis a verlo vosotros mismos.
Es un local ideal para una merienda tardía o una cena informal.
También para venir a hacer una comprichuela y sentarte un rato relajadito tomando algo, leer un libro o simplemente disfrutar del momento.

¡Qué agustito se está en S’Alat! Y es que es muy agradable y altamente recomendable bien para merendar, comer, cenar o simplemente para hacerse una «picaeta».
Su nombre es muy esclarecedor ya que es bar y tienda, en la que vas a encontrar productos 100% mallorquines: Vino, cerveza artesana, refrescos, confituras, aceite, quesos, sobrasada, y cosinas varias.
El local es amplio, claro, fresco, con decoración que nos transporta al momento a Mallorca. De hecho, las mesas y sillas están vestidas con ropa de «llengos» (tela mallorquina) en tonos azules y queda realmente bonito.
S’Alat dispone de un patio precioso donde se está muy fresquito y huele a jazmín, y también de una sala de lectura, donde encontrarás libros sobre Mallorca.
Hasta el wc es una cucada, con todos los dispensadores de mimbre. Muy limpito y agradable.
Si algo me ha gustado especialmente es la Pep Lemon, un resfresco hecho con limones mallorquines y que te la sirven con unos cacaos y unas olivas. Bueno, y el chico que nos ha atendido: paciente, simpático y bien majo.
Atentos a su página del caralibro, que hacen eventos bien chulos: