Almacén de Pizzas

Me copa para pedir a domicilio, el local es chico y muy ruidoso. Está bueno porque no está en pleno cabildo y si estás por la zona de Barrancas, es una buena opcion para comer buena pizza sequita y a la piedra.

El Almacen de Pizzas es un local genial si te gusta la pizza no tan grasosa. Hay tamaño chico o grande (donde no es el clásico de ocho porciones sino de diez). Recomiendo la variedad MyF que tiene jamos crudo, tomates secos, rucula y parmesano. Aunque tiene varios gustos gourmet como esparragos y queso brie. La verdad es que es muy rica aun si pedis una pizza clásica. Además, podes pedir empanadas, tartas, rolls entre otras cosas. De postre tienen una carta acotada con flan, mousse de chocolate y helado.
Tienen delivery pero a veces conviene llamar y pasar a retirar porque suelen tener demoras en la entrega. En este local hay algunas mesitas adentro (es muy chiquito) y un par afuera. La atención es buena.

Es un local chiquito, no tiene toda la onda del mundo pero es agradable. La atención me pareció muy buena con detalles del tipo traerte una cazuelita con queso y aceitunas mientras esperás tu pedido.
La pizza es bien finita y muy rica, con ingredientes de buena calidad. Se puede pedir mitad y mitad.
Otra buena es que hay cerveza de litro.

Amo la pizza, sinceramente. Me encanta probar nuevos tipos y si pudiera comer siempre pizza lo haría. El almacén es un lugar bastante tradicional, no hay gustos así como innovadores pero siempre la pizza es rica. Los locales son lindos, con buena atención y copados para ir con amigos mas que nada. El ambiente esta bueno porque es relajado y la comida es rica desde el plato principal hasta el postre.

Vine acá a una reunión de amigas porque nos quedaba a mitad de camino para todas, y por la zona después de las 9 pm es fácil conseguir estacionamiento. Esta sucursal del almacén deja bastante que desear. La atención es ni fu ni fa, mal muy mal para una pizzería, mas aun que hay re pocas mesas, o sea que ni escusa para atendernos con mala onda tenían. Los baños son chicos y feos, el resto cumple hasta ahi las mismas líneas que casi todos los almacenes de pizza, pizza fina, sabores modernosos, cervezas no del todo fría.

La pizza es lo mio. Es esa comida que como mínimo 5 veces por semana –y no me canso. Es más, siempre falta.
En general la cocino yo, pero a veces llego demasiado cansada, o simplemente estoy demasiado cómoda en el sillón, y prefiero pedirla por teléfono. Mis opciones son limitadas por la zona en la que vivo, pero una de las que llega y mi favorita para pedir es la del Almacén.
Es de masa fina, crocante, nunca quemada, y –depende de la variedad que pidas– con el queso bien distribuido (detesto los «black sports» de queso mál puesto). Mi variedad favorita, por lejos, es la pizza blanda: brie y rúcula. No escatiman para nada con el brie, y el resultado es delicioso.
Además de pedir, también suelo ir a este local a comer porque no suele llenarse de gente ya que está unas cuadras alejado de la avenida Cabildo. El lugar es, como dije pequeño, limpio, y te atienden muy bien. No será para una cena de lujo, pero sin duda el Almacén es un gran sitio para ir casualmente con tu pareja o amigos.