Besares

Fuimos a cenar dos veces con la familia, y las dos veces nos quedamos maravillados por la calidad de la carne que sirven. El lugar es muy lindo, tiene la parrilla en medio del salón, y uno puede ver con qué deleitarse. Aún así, no hay ni un poco de humo ni de ruido, gracias a la super campana de extracción que tienen.
Las papas fritas con cebolla son la gloria. No sólo la porción es abundante, sino que también son riquísimas. De carne probamos entrañas y bife de chorizo, todo excelente!
Hablando de carne hoy en día no sabría decir qué es caro y qué es barato, bah, barato no es… Pero calculá que vas a gastar entre $ 250 y $ 300 por persona fácil. Pero la calidad es muy buena.
Se puede pagar con tarjeta de crédito y te ofrecen una copita final de champagne o lemoncello.

Para MI una de las 3 mejores parrilas de capital. No puedo decir que sea barato pero cada centavo lo vale. Creo que la pamplona (la de lomo) es lo mejor que tienen. Espero que puedan visitarla! saludos

Besares tiene 3 sedes, como trabajo cerca de la sucursal que queda justamente en la calle besares, vamos cada tanto los mediodías.
Tiene menu ejecutivo, como la mayoría d los lugares dos tipo, con o sin entrada.
incluye, plato principal, bebida, postre y café.
Como su especialidad es la parilla, en el menu ejecutivo hay, bondiola, matambre a la pizza, pollo, entraña, también hay un par de platos de pastas. Viene con guarnición para elegir, entre fritas, pure o ensalada.
El postre es flan, helado o ensalada de fruta.
La verdad q todo muy rico, no decepciona. No es un lugar muy grande, por lo cual recomiendo reservar.

Lamento hacer una review así de Besares. En mis días pre-​Yelp vine varias veces y habia tenido una buena experiencia.
Hoy veo que cambio bastante y salí decepcionado.
La atención fue bastante deacuidada. Los primeros 15 minutos me dejaron solo una carta de vinos, nada mas.
La panera llego con parte de la comida y la bebida casi 50 minutos despues de pedir.
Mi comida no puedo evaluarla, ya que nunca llego y tuve que cancelarla.
Como punto positivo, los platos de los demas estaban bastante ricos, unas papas fritas con cebolla y un matambre de cerdo.
Por ultimo, mientras espero unos 20 minutos la cuenta me dedico a escribir la reseña.
No creo que vuelva, una pena ya que me parecia la mejor parrilla de la zona.

Fuimos sin saber qué nos íbamos a encontrar porque no conozco mucho el barrio. Festejamos el cumpleaños de mi papa en familia y me llevé una excelente impresión de Besares.
Algunas razones: la carta, que es totalmente amplia y con precios accesibles desde milanesa hasta platos del chef; la calidad de la carne, ya que pedimos vacío y estaba exquisito y con una porción grande; atención, nos toco un mozo súper atento a todo lo que necesitábamos. Por ejemplo se dio cuenta que no nos gustaba mucho el pâté que viene con los panes calentitos para empezar y nos trajo queso blanco. También al final de la cena, nos sorprendió con un tiramisu riquísimo con una vela y 4 copas de champagne.
Como dije antes, las porciones son grandes y los precios muy acordes. Volvería y lo recomendaría a todos!

Esta es una linda parrillita, con mesas afuera.
Pedí un bife de lomo que estaba en el punto de cocción que pedimos y la carne muy tierna.
La atención es muy buena y el servicio de mesa incluía una canasta de pan calentito acompañado de un paté casero muy bueno.
Los precios no eran exorbitantes. Volveré seguro.

Muy buena parrilla. Buenos cortes de carne, nada marcado. Todo hecho en el momento! Con el punto justo de cocción que uno pide. Precios moderados, buena atención. Tiene delivery.

Me lo recomendaron muchas veces y siempre está lleno.
Anoche intentamos una vez más y conseguimos lugar.
El lugar es tranqui y ameno. Me encanta la
la luz tenue pero en este caso me parece q hace falta un toq más de iluminación!
Muy buena atención.
Los platos normales, no salen de lo normal, pero los precios un poco altos.
Lo bueno es q se pueden compartir casi todos los platos.
Nosotros compartimos y quedamos muy satisfechos.
Si estás x la zona y encontras lugar te lo recomiendo, si tenes q esperar no creo q valga
.pena

Probablemente una de las mejores parrillas de Buenos Aires. No es un lugar barato, pero su precio es acorde a lo que brindan. Muy buena atención y gran calidad hacen de este restaurante uno de mis favoritos.

En la esquina de 11 de septiembre y Besares, en el barrio de Núñez, hay una parrilla (ellos dicen que es una parrila urbana (?)), que se llama BesAres. La originalidad les dio para una letra en mayúscula.
La parrilla está bien, pero hay que decirlo, es una parrilla como tantas otras. Hay opciones de pastas y minutas por que siempre está el infla ovoides que va a una parrilla pero no le gusta demasiado la carne (yo, obvio). A mi que la vaca no me va ni me viene, me vino bárbaro.
La carta de vinos (segun decian los hombres de la mesa que tomaban) era limitada.
Lo mejor del lugar son las mesas en la vereda, en una noche de verano, está lindo para sentarse alli y respirar un poco de aire natural. Está muy bien el ambiente, se puede ir con amigos, familia y pareja. Es grande, con mesas bien distribuidas y espacioso. Algo super importantísimo y que se valora es que cuenta con baños para discapacitados.

esa terraza vale una visita en una noche calida. sin dudas.
el resto esta bien, pero no llama la atencion por nada en particular.
la comida es buena, se puede ir con amigos tranquilamente.
nosotros eramos seis y pedimos un poco de todo y todo salio bien.
ademas el lugar es inmenso y eso te garantiza que vayas a conseguir una mesa seguro, aunque sea un sabado a las 10 de la noche.
los mozos son amables y eficientes.
ahora, es un poco mas caro de lo que deberia, sobre todo la carta de vinos.
la ventaja es que por la zona hay poca oferta gastronomica, aunque lentamente va aumentando. y parrillas no hay demasiadas.
y si ademas se come bien es una opcion para tener en cuenta. quizas no vaya a ser la primera eleccion, pero no va a defraudar tampoco.

Y no son cinco, porque el mozo repitio tres veces que queriamos de postre, y en lugar de flan trajo budin de pan…
Besares es una hermosa parrilla en el bajo Nuñez, en la esquina de Manuela Pedraza y 11 de Septiembre
Tiene dos plantas, una amplia en planta baja, con mesas y sillas de buena madera, y sobre la pared lateral mesas con silloncitos, para despatarrarse despues de una buena parrillada. La planta alta es mas intima unas pocas mesas, pero menos ruido que abajo, y tiene un sector que puede ser tomado por asalto por un grupo que queda casi como un privado
La carta es muy amplia, toda la parrilla es muy buena, y al mediodia tienen menues ejecutivos muy economicos, con entrada y opcion sin entrada.
Ademas hay pastas, ensaladas, y una cava astante importante que cubre toda la pared del fondo
Muy recomendable

Durante una época viví en el barrio de Núñez a dos cuadras de donde se encuentra esta moderna parrilla. Por lo cual tuve la oportunidad de visitarla en varias oportunidades. Aunque debo confesarles que muchas de esas veces repetí mi elección de menú. No por falta de opciones ya que si la visitan van a poder elegir entre una amplia variedad. Pero yo me hice fan de su Papa Besares. Son papas rellenas al plomo, ideales para acompañar unas buenas carnes asadas.
Las porciones son muy abundantes, algunas para compartir. Les recomiendo que les consulten a los mozos antes de pedir. Además los precios no son demasiado accesibles por eso es una buena solución compartir entre dos algún plato.
El lugar es bastante amplio hay un salón en la planta baja, otro más íntimo en la primera y por último una terraza, que en invierno también se puede utilizar porque una parte está cubierta y hay calentadores que la vuelven mucho más cálida.
Un dato de color para los fanáticos de River, es uno de los lugares del barrio que suele visitar el Burrito Ortega. Yo me lo cruce en una oportunidad.

Esta parrilla/​restaurante es muy buena. No solo se limita a tener parrilla, también tiene otros menúes para aquellos que lo prefieran. Pero cualquiera sea la opción que uno elija, la comida es de calidad.
Cuando voy con amigos, pedimos una picada de entrada, porque el fiambre es excelente, y así esperamos que nos traigan la comida, que suele tener demora.
La ambientación es fina, pero sencilla. Tiene mucho metal y madera, y como colores se destacan el blanco, negro. Cuenta con una terraza digna de aprovechar en verano. Los manteles y servilletas siempre están suaves, algo que me encanta (en contraposición con esos lugares donde los manteles son ásperos); y los cubiertos siempre tienen buen filo, algo elemental para una parrilla.
Las mesas están bien espaciadas, eso te permite estar cómodo, sin embargo, el número de mozos suelen ser menor del adecuado para esa cantidad de comensales.
Está abierto al mediodía (y hay menúes ejecutivos muy recomendables) y a la noche. Lo recomiendo para ir con amigos ó en pareja, porque si llevas nenes, no tienen nada para hacer.