Este Rick’s Café no tiene nada que ver con el de la película Casablanca. No hay Sam, no hay mesas de juego, y definitivamente no hay Rick Blaine. Es más bien un clásico café porteño para tomar un cortado, de esos que no tenés ni que pedir por el nombre sino con esa batiseñal universal del café que entienden en todos lados(menos en Starbucks). Me pedí un café sólo, mientras hacía tiempo para entrar al médico. Horrible –casi tanto como tener que ir al médico. Luego me pedí un cortado, un poco menos feo, pero aún así, aguado y triste. Después de esta segunda decepción con el menú no pedí nada para comer, pero en el mostrador se veían varias cosas dulces, entre ellas, medialunas de aspecto«industrial»(esas que sólo calientan en los cafés, pero vienen congeladas).
Lucia D.
Rating des Ortes: 3 Buenos Aires, Argentina
Rick’s Café abrió el año pasado, a una cuadra de 9 de Julio y a dos de la Facultad de Sociales de la UBA. Muchos alumnos que salen hambrientos o profesores que tienen que hacer tiempo aprovechan para comer algo ahí. Yo creo que si no fuera por esta cercanía, no tendría mucho éxito. El lugar es normal, bueno para tomar un café o almorzar sin muchas expectativas. El otro día fui a almorzar con una compañera. Pedimos una hamburguesa completa y una porción de tarta. La comida es de esa que te podés hacer en tu casa tranquilamente, pero saca de un apuro y funciona como buen lugar de reunión para armar un trabajo práctico(las mesas están separadas y no hay mucho ruido). Los precios son normales y el local está limpio, principalmente porque todavía parece nuevo.