Pétalos de sol

En este lugar juro que perdí la cabeza un día tome una cerveza y estaba totalmente desorientada no sabía dónde estaba nada! La música rock pesado no es mi estilo!
Si te gusta el rock y el heavy es tu lugar! Está claro que no sería mi caso! No probaría una pizza ni loca porque me re da a sucio pero la verdad no sé qué tipo de higiene tienen en la comida!!!
Abre casi todos los días de la semana hasta cualquier hora!!!

Rrrrooock n rollleeeennn!!! Pétalos es el inframundo de nueva córdoba, con rock y sangría. Es un sótano oscurito, con gente copada y rockera, para mover la patita y tomar sin exigir gran coctelería, sencillamente tomar. Probablemente abajo no tengas señal y entres en pánico, ya que en este submundo no te queda mas remedio que hablar, mirar a la gente y bailar. No permite distracciones tecnológicas, pétalos es absorbente. Si estabas esperando el mensajito de una dama o de un caballero, siempre podés volver a la realidad un momento, con un sello verde color esperanza de por medio, y chau pichu. Sangría y Kiss, campari y Rolling Stones, fernet y Blur, son algunas de las cosas que podés encontrar.

Que vas a opinar del viejo y querido Pétalos! Vayan, tómense una sangría (que yo ya las denominaría «pétalos» a esta altura), bailen unos rockandrolles y vuelvan a casa tranquilos.

Quién no terminó al menos una vez en este lugar, de seguro, aún no puede hablar de la noche cordobesa. Y sí, es el clásico de los clásicos. Todos sabemos que este pub es rock, es locura. Que incluso no siendo amantes de esta música o de la onda, de seguro tenemos un amigo que es de lo más fanático y te hizo caer al lugar al menos una noche. Hay aceptar que es un lugar donde se puede caer cualquier día de la semana y siempre habrá adeptos que deciden vibrar el rock and roll. Conozco a varios locos de la noche que solo salen si van a este pub, no le vengas con la opción del boliche de moda porque no hay manera de convencerlos.
Hace poco fuimos un miércoles por un cumpleaños, y acepto que hacía varios años no andaba por ahí, y siempre igual!!! Es como si sus dueños hubieran encontrado la fórmula mágica y perfecta que hace no necesitar más nada que esos colores psicodélicos por paredes y techos, un subsuelo bastante oscuro que solo tiene luces de colores bien tenues, un gran barra dispuesta a venderte una cantidad innumerable de baldes de cerveza y de fernet, una tribuna loca y exclusiva en su especie que es apta para chapar con tu chico, un par de baños que son de lo más diminuto y te obligan a la contorsion… y nada, una seguidilla de rock y onda que te hacen volar la peluca. No hay otro, es el único en su especie, no cambia la fórmula, no necesitar sorprender, tiene su olor propio y es claramente una marca registrada… es Pétalos de Sol, lo encontras al frente de la Cañada, se distingue por desfachatado. Nada más, el resto sobra!

Pétalos de Sol, es un Bar /​Boliche ubicada entre la calle Marcelo T. de Alvear (Cañada) y Boulevard San Juan.
A partir de las 23:00 hs. Uno puede disfrutar de tomar una cerveza bien helada o sangría, sentado y tranquilo, charlando entre amigos y escuchando música de la mejor: Rock, Reggae, Heavy, Ska, entre otros estilos. Si realmente disfrutás de esta música, sinceramente no conozco otro lugar mejor en Córdoba Capital. Tiene grandes televisores colgados en la pared, así uno pueda ver videoclips de la música que van pasando. Una gran particularidad del lugar es que si vas temprano podés jugar partidas de ajedrez, rasgo distintivo de Pétalos de Sol.
Pasadas las horas, el Bar deja de ser Bar, las mesas y sillas empiezan a apartarse hacia un costado y la gente empieza a sumarse. No hay que preocuparse del calor, ya que dispone de varios aires acondicionados (creo que es el único boliche de Nueva Córdoba que no se sufre del calor). Se torna un lugar genial para bailar rock y tomar cervezas heladas. Te recomiendo ir temprano, ya que el lugar no es grande y a partir de las 2 o 3 hs. de la mañana, ¡la fila se hace interminable!

Un clásico de la noche cordobesa, si lo que se quiere es ir a escuchar rock, no hay mejor lugar que Pétalos.
Por empezar está en un sub suelo, lo que era realmente ideal cuando se podía extender la noche hasta las 9 de la mañana, cosa que no sucede hace varios años por disposiciones legales.
Este lugar tiene algunas particularidades, la primera de ellas es que si vas temprano, a la hora que arranca tipo 12, te sentas en la barra, y te prestan un juego de ajedrez. No hay como una partida de ajedrez con un amigo, al ritmo de los redondos y con una fresca en la mano.
Ya un poco más tarde el lugar se suele llenar, con la particularidad que no importa el estilo, vestimenta, look, o peinado que tengas, en este lugar está todo bien.
Otra de las particularidades que tiene este lugar es la tribuna de cemento que tiene en uno de sus lados, con tres escalones, estilo estadio de fútbol, donde te podes sentar con amigos a charlar mientras tomas algo.
En cuanto a la bebida, es tradicional la sangría, bebida que se obtiene cambiando el ticket que te dan si pagas la entrada. También tienen una gran variedad de tragos y bebidas, pero lo que abunda en este lugar son los vasos de litro de cerveza.
Por último y un detalle que particularmente me gusta mucho, si en las pantallas pasan un video, la música que suena es la de ese video.

Ubicado sobre Cañada, a metros del Boulevard San Juan, Pétalos es uno de los boliches under más clásicos de la ciudad. Con su característico decorado que homenajea la obra del pintor austríaco Hundertwasser tanto dentro como fuera del local, posee un sótano muy amplio donde se dan cita los más variados estilos musicales: rock, pop, ska, reggae, punk, etc.
Se proyectan videos en una pantalla situada al fondo, junto a la entrada de los baños. Cuenta con unas gradas para sentarse a lo largo del lugar, como si se tratara de una tribuna. Si uno va temprano, no es raro encontrar a algunas personas (en su mayoría, hombres) jugando al ajedrez. A veces, hasta puede verse a alguno de los guardias participando.
El sonido del lugar no es del todo perfecto, pero se compensa por la buena onda que le ponen a las listas desde la cabina. Las bebidas son económicas, hay precios y promociones para cerveza y fernet. También es posible beber algunos tragos específicos, aunque tampoco es la especialidad del lugar. Pétalos de sol es uno de los últimos coletazos del under cordobés, con reminiscencias de los ’90 (ya funcionaba por ese entonces, pero con otros dueños y otro nombre), un lugar especial para ir a conocer gente con ganas de divertirse y encontrarse con amigos.

Pétalos fue mi templo de perdición cuando iba a la facultad. Y no porque hiciera nada que reprobaría cualquier buena vecina de barrio sino porque me instalaba por horas todas las santas noches. Aunque no tuviera un peso partido en dos, lo mismo iba: me sentaba en la tribuna y escuchaba música hasta hartarme. Llegaba temprano y no me cobraban la entrada. Incluso a veces caía sola, siempre me encontraba con alguien.
Con la excusa de la nostalgia, el tiempo pasa y sigo yendo. Lógico, ahora se redujo la secuencia, pero voy de vez en cuando y como quien no quiere la cosa. La música sigue siendo la mejor con el plus de que coincide lo que suena con lo que proyectan en la pantalla.
No hay vueltas: el sótano en el que se encuentra, siempre tuvo y tendrá el efecto de transportarte a una dimensión paralela. En esa dimensión todavía me cruzo con los habitué de aquellos años felices mezclados con gente totalmente desconocida.
Aviso: todos caen a partir de las dos y media, tres después de hacer la previa en otro lado y se amontonan en una cola eterna para entrar. Pero más vale prevenir que seguir sobrio: la previa también está bueno hacerla directamente en Pétalos.
Para pasar directo, date una vuelta los domingos.

Tengo taaantos recurdos de pétalos, y no debo ser la única. Cuando surge el tema de pétalos cada uno puede contar alguna anécdota: a un compañero de inglés vio fideos en su camisa que habían sido ingeridos por una persona que había tomado mucho y tendría el estómago medio revuelto…
Una amiga no conocía el lugar, le habían dicho que estaba bueno pero no le dieron muchos detalles. cayó con sus tacos súper aguja, y cayó, porque se pegó un golpe al bajar las escaleritas y sus súper tacos se rompieron…
A mi me encaró el novio de una amiga, situación incómoda si las hay…
Pétalos esta ubicado en Cañada y Bv San Juan, es un subsuelo con una entrada muy colorida, donde predomina el rock nacional como música. Es muy chiquitito, y se llena de gente… conviene no ir muy tarde porque podes estar más de una hora haciendo cola, y además pagar.
Tiene la comodidad de estar cerca de todo, y en la misma calle que otros bares o pubs, cosa que si te saturas tengas más opciones sin tener que caminar mucho.
No hay mucho para contra quizás sobre lo que lugar ofrece, las historias surgen porque casi todo el mundo que salió a por el centro fue alguna vez a «petalear» tiene algo para contar de esa salida.

Cuantas noches en Pétalos de Sol. Todas distintas, todas únicas.
No sé bien cuál es la magia de este lugar, o tal vez si, la fui descubriendo.
El lugar es cálido. Personalmente me gustan las cosas descontracturadas, y Pétalos es uno. Si bien hay mesas donde sentarse a un costado, casi escondidas, el lugar de encuentro principal son unas escalinatas que recorren toda una pared lateral.
Cuantos momentos vividos en esas gradas.
Para quien le gusta el rock nacional, el reggae y rock no tan nacional, Pétalos es EL lugar.
El ambiente es relajado, colorido, alegre. La gente también.
Está ubicado en Cañada y Bvd. San Juan aproximadamente, muy céntrico.
Cobran entrada, pero vale la pena.
Una contra! Los baños. Tan reducidos que hay que hacer la parabólica para poder usarlos. Y la entrada. Si vas después de las 2am., seguramente estas un buen rato esperando para poder entrar.
Mis noches preferidas para ir siempre fueron los miércoles, o los jueves. Durante el fin de semana la música y el estilo de gente cambian. Y no hay nada como cortar la semana con buena música y un vaso de cerveza en la mano.
Es el típico lugar para contar «lo que le pasó a un amigo» de modo anónimo, y poder reírte de la situación.