Rincón Nuestro

Si tuviera que definir mi experiencia en Rincón Nuestro Pizzería Popular en dos palabras, ellas serían: Sentimientos encontrados.
No era nuestra intención ir a este lugar, sino a otro que está al frente pero a fuerza de hambre y falta de mesa disponible, tuvimos que cruzar la vereda. Jum.
Re lindo espacio, plantitas en todos los estantes, ligustrines, luces copadas. Todo muy lindo.
Nos sentamos en una de las pocas mesitas disponibles del exterior e, ipso facto, apareció una pibita –que con suerte rozaba los 20 pirulines– y con su ánimo efervescente nos dejó la carta. En nada volvió a tomar el pedido: Stella y una pizza con nombre raro pero con ingredientes «comunes»: tomate, mozzarella, albahaca y panceta.
Todo vino súper rápido!
La cerveza podría haber estado más fría, pero no estaba tibia ni temperatura ambiente. Pasó.
La pizza muy rica. Pero el centro de la misma no tenía piso y la corteza era color NEGRA, ergo, quemada. Bueno, no comés la corteza y listo! Pasó.
La chica efervescente aparecía cada 10′ a preguntarnos si estaba todo en orden y luego se esfumaba (en varios momentos pensé en Sheldon vestido de Flash). Está bien, el local estaba hasta el tongo de gente, así que todos volaban de acá para allá. Me dió mucha sensación de fast food y para un alma vieja como sho (que amo la sana costumbre de la sobremesa), eso es un poco incómodo.
Y lo que no me terminó de cerrar es que, cuando pregunté si recibían débito/​tarjeta, me dijeron: no tenemos post-​net. A ver. La pizza más barata sale cerca 200 pe y sólo laburas con efectivo? Media pila!
No sé si voy a volver. Como dije al principio, aún tengo sentimientos encontrados.

Nunca me atendieron tan mal en un lugar. Apenas llegamos quisimos que nos tomen la orden como tres veces y los mozos nos ignoraban o directamente no venían cuando los llamábamos. Después de treinta minutos logramos que nos atiendan, todo lo que queríamos pedir no había. Coca zero? Termine tomando pepsi normal, una stella chiquita? Termine con una Quilmes y así todo, con la comida lo mismo. Pedimos un cenicero, nunca llegó. Nos traían las cosas sueltas o se olvidaban del pedido. Pedimos una picada porque eso era lo único que había y la verdad malisima, nada especial para los precios que tiene. Horrible.

Ideal para after o cenas para cortar la semana. El lugar es muy cálido y agradable y la atención es muy buena. Venden fiambres de excelente calidad tanto para consumir en el local como para armar tablas para llevar a tu casa. Si vas a tomar una cerve por la tarde recomiendo pedir una picada de nachos, viene con abundante queso chedar, y si querés más queso pedis y te lo recargan!!! Para estar adentro no hay demasiado lugar pero hay mesas afueras, por lo que si el clima acompaña no deberías tener problemas. Eso si, no vayas muy tarde porque siempre hay gente, señal de la calidad tanto de lo que ofrecen como de la atención.

Fui a almorzar con mis viejos que estaban de visita y la verdad es que los 3 salimos chochos de ahi.
Muy buena atención, rica comida y lindo lugar. Pedimos una picada para 2, bastante abundante y los tres quedamos súper satisfechos. Fiambres de primerísima calidad, pan casero y algunas tartas más «saludables» o ensalada si no se quiere optar por picada o sandwiches.
Mientras esperábamos la picada, nos trajeron unas bruschettas con hongos, morrones, tomate cherry y rúcula que estaba de-​li-​cio-​so.
Definitivamente, un lugar para volver :)

No frecuento la zona, pero debería porque lugares como Rincón Nuestro hacen que valga la pena el viaje. Domingo a la noche, teníamos ganas de tomar una cervecita para despedir el finde y llegamos a Rincón Nuestro, un pequeño barcito que se especializa en fiambres y picadas sobre Luis de Tejeda.
Estaba un poco fresco, así que fuimos directamente adentro pero las mesitas de afuera se veían muy tentadoras para las nochecitas de verano que ya llegan en cualquier momento. La decoración tiene un estilo que pretende ser rústico, con muebles de madera sin barnizar. Antiguas balanzas y otros objetos de antaño sirven de decoración por todo el local.
Una de las paredes laterales está tapizada de botellas de vino que están a la venta, la barra tiene unas banquetas para sentarse.
Pedimos una Stella (sólo tiene línea Quilmes, una lástima) y una porción de nachos con cheddar que era enorme. La carta tiene otras opciones, pero la especialidad de la casa es la picada. Vi pasar un par en el ratito que estuvimos y la verdad que se veían espectaculares. Pan casero, mucho jamón crudo, queso azul… Una delicia. Los sándwiches también prometen mucho.
Quedaron muchas cosas para probar y definitivamente pienso volver.

Muy lindo, comimos una super picada. que nos pasó. .reservamos y nos pusieron en la vereda… se mataron c la reserva. Le agregaría mas postres, el dulce y queso solo no da.

La contraseña del WiFi es holamivida y no es un chiste.
Llegamos a este lugar porque en realidad estábamos buscando otro, teníamos mal la dirección y no teníamos ganas de seguir buscando. Sólo lo conocíamos de nombre, pero cuando lo vimos nos tentó.
Fuimos tipo diez, hacía calor y Rincón Nuestro tenía muchas mesas al aire libre, no lo dudamos. Como estaban todas llenas nos anotamos en una lista para esperar que se desocupe una. Estábamos esperando a más gente así que si o si teníamos que esperar antes de pedir, por eso no nos costó tanto la espera. Tardaron 20 minutos en tener una mesa libre, fue bastante, o nosotras no teníamos tanta paciencia. En el tiempo de espera fuimos a la otra cuadra, que hay otro local de la franquicia, también todo lleno. Además el otro lugar no tenía música, nos pareció aburrido.
Cuando se desocupó una mesa nos sentamos, nos trajeron la carta y pedimos un sándwich de jamón crudo y queso. Era de la medida justa para compartir si no tenés mucho hambre. Me llamó la atención que los sándwiches salían todos lo mismo: jamón crudo, cocido, mortadela,…
La atención es excelente, las mozas son amables. Cuando ya estaban por cerrar, empezaron a juntar las mesas y las sillas libres, en ese momento una amiga se levantó al baño, y apenas vieron una silla desocupada la quisieron levantar *siendo que todavía había otras mesas y sillas desocupadas en el lugar. Eso fue algo que nos incomodó, fue como un «vayansé», así que nos fuimos.
Pero en general es muy bueno, además para estacionar hay lugar en toda la zona, si estacionás en una de las perpendiculares podés zafar del naranjita.

¡Excelente bar/​restaurant de picadas! Ahora que se aproxima el verano voy a frecuentar más el lugar. Lamentablemente siempre está lleno, por algo será.
Las picadas son riquísimas, abundantes y muy bien preparadas. Si bien sus tablas son clásicas (jamón crudo, salame, queso y aceituna), con una sola pueden llegar a comer hasta tres personas. También tienen una variedad de cervezas geniales. La atención impecable, siempre está casi lleno y las tablas te las entregan rápido. No se debe esperar mucho.
El local es muy grande, su diseño son muy particulares que lo distinguen del resto, suma muchos puntos su buena iluminación y está bien ubicado. Casi siempre hay algún lugar en la calle para estacionar.
Ahora si quieres considerarlo un lugar para ir a menudo, va a doler un poco el bolsillo. Es un lugar ideal para ir con amigos de vez en cuanto porque es un poco caro. Recomiendo este lugar en noches de calor, vas a pasar una noche agradable.

Rincón Nuestro es un bar/​resto que se especializa en servir picadas.
Ocupa un lugar privilegiado en el Cerro de las Rosas, en una de las calles que se está poniendo de moda.
El local se encuentra muy bien decorado, con mesas y sillas de madera muy pintorescas, luces colgantes y todo tipo de adornos al estilo campestre. Presenta un espacio interior un tanto reducido, pero una zona exterior amplia, que permite alojar a varios comensales.
La atención es muy buena. Hay varios mozos que están constantemente alertas por si algún cliente necesita algo y casi siempre se encuentra algún dueño presente, ya sea para atender o para resolver cualquier inconveniente que surgiera.
Recomiendo la tabla de la casa, que viene con un arsenal de fiambres de todo tipo y con algunas cazuelas de aceitunas, pickles, escabeches, entre otros… El pan es casero y fresco.
En cuanto a bebidas, presentan mayormente opciones de vinos para todos los paladares. En especial no soy muy amante de los vinos, por lo que prefiero optar por una cerveza fría (mejor dicho, helada), que además viene en un recipiente que le permite mantener la temperatura adecuada.
Recomiendo!

Rincón nuestro (Almacén de Mesas) es un 10!!!
Ahora que se acercan las noches de verano no va a faltar oportunidad para ir a picar algo con amigos.
El lugar tiene una onda increíble. Mesas sobre la vereda, luz tenue y buena música.
Con un ambiente más que relajado y en una ubicación tranquila, este «almacén» ofrece unas tablas que no podes dejar de probar. Son super abundantes y con fiambres de excelente calidad. Si sos amante de los quesos, acá vas a degustar de los buenos. Si preferís otras opciones, encontras variedad en sándwiches, nachos, bruschetas y escabeches que yo no dejaría pasar.
Respecto a la carta de bebidas, Rincón propone «Vinos Boutique». Mucha variedad y vinos de grandes bodegas del país. Yo siempre opto por las cervezas, hay unas cuantas opciones y son de primera marca y a buen precio.

El hermano mayor de esta pequeña cadena de Bares. Con mas mesas y un diseño muy peculiar este bar, en el corazón del cerro de las rosas, es de lo mejor de la zona. Espacios interiores y exteriores, buena musica y una atención impecable (muchas veces por los dueños que son muy piolas).
Las tablas son su especialidad, muy bien presentadas y con productos de primera calidad. La cerveza siempre helada!
Precios moderados/​altos

Rincon esta muy bueno por es un lugar de picadas, tenes para 1, 2, 3 o 4 personas. son bastantes grandes y vienen con todos los fiambres. yo voy bastante seguido ya que no es caro para la ubicación en la que esta, se debe comer por $ 100 por persona. cuando vamos con mis amigas, si somos 4, pedimos una para 3 y unos nachos que también son muy ricos, le ponen mucho queso.
Lo mejor es ir en verano para estar sentados afuera y tomar una cerveza o algo fresco, lo que si se llena muchisimo asi que hay q ir con tiempo o reservar.
No solo se puede comer picadas sino que también hay sandwiches y tartas, es ambiente es lindo son siempre chicos jóvenes y le ponen muy buena onda.
Ademas hay una heladería al lado para el postre. si vas a comer picada te recomiendo que pida humus, no te lo dan si no lo pedis, es como una salsa con berenjena que la verdad que no tiene mucha pinta de rica pero te sorprende