Panaderia La Continental

¿Qué cosa mejor hay que levantarse un domingo a la mañana y que tu pareja se ofrezca a ir a comprar los bizcochos para el desayuno? Pues que los bizcochos sean de la panadería La Continental.
Cuando soy yo la que va a comprar el desayuno siempre se me ríen porque nunca vuelvo sólo con bizcochos, sino que suelo sumarle a eso unas medialunas, quizás unos cuadraditos de hojaldre, o palmeritas o alfajores de maicena para comer de postre en el almuerzo. Nunca puedo simplemente entrar, comprar lo que me han encargado e irme; todo tienta demasiado.
La panadería es una esquina vieja y funciona ahí hace añares. Además de pan (el caserito es lo más para hacer sándwiches), facturas y masas hacen tortas en diferentes tamaños, sándwiches caseros, masas de pizza, chipacitos (son diminutos, debo decirlo), empanadas que siempre te sacan del paso si no sabés que cocinar y tartas. También venden panes de pancho y de hamburguesa de elaboración propia, que se puede comprar por cantidad por encargo.
No importa a la hora que vayas, siempre está lleno de gente, pero como hay para sacar número y hay varias personas atendiendo, no hay lío del tipo «yo llegué primero, no, yo llegué primero» y nunca hay que esperar demasiado. Atienden de corrido, no cierran los lunes y están abierto hasta tarde, así que punto para ellos.
¿Los precio? Promedio. No es como comprar el pan en el súper, que es más económico, pero la calidad no tiene comparación tampoco. Altamente recomendable.

Histórica panadería en la esquina suroeste de Sarmiento y Montevideo, abierta todos los días con un horario más que conveniente. Encontrarás realmente todo lo que vas a buscar, para los que prefieren salado cuenta pizzas listas para el horno, pre pizzas y una panificación variada para todo tipo de sándwiches (pan de miga, bollitos para las famosas «patas», pan flauta, etc.) y además ellos tienen su propia producción de sándwiches de miga de gran cantidad de gustos, yo recomiendo el de palmitos y salsa golf. Para los amantes de lo dulce ofrece tartas gigantes, medianas y pequeñas, también tienen grandes bandejas de tartas de coco y dulce de leche, pastafrola, y la mejor de todas la de ricota! (me atrevo a decirles que es la mejor de Rosario), lo que no recomendaría son las facturas, ya que son «mediocres». En cuanto a los precios podría decir que no es caro ni barato, pueden sonar elevados los precios de algunos productos dulces pero hay que tener en cuenta que son muy rendidores.