Servicio lento. Nos clavó unos nachos que no queríamos. Para no volver pese a que la comida y las cervezas están bien.
Gabi R.
Rating des Ortes: 1 Valencia
Servicio pésimo, largas esperas, pasta mediocre, precios desorbitados para la calidad de los platos. Con eso creo que lo he dicho todo… No volveré.
Simasan S.
Rating des Ortes: 3 Valencia
Resulta bastante agradable por el entorno en el que se encuentra, pero no deja de ser un restaurante italiano normal y corriente a precios excesivos… Lo único por lo que merece la pena visitarlo, es la gama de cervezas artesanas de las que disponen, de fabricación propia.
Fatine Z.
Rating des Ortes: 3 València, Valencia
Después de una mañana de Surf, buscamos un local donde poder reponer fuerzas. En primera linea de la playa de la Patacona, encontramos este local, nos llamó la atención el nombre y nos aventuramos a probarlo. Una decoración un tanto peculiar y original, vale la pena verlo. Pedimos un plato cada uno, me decanté por una ensalada. La verdad que estaba muy buena, de cantidad era correcta, aunque no se puede decir lo mismo por todos los platos, los de pasta me parecieron bastante escasos, aunque tenían una pinta increíble. El trato es muy amable y desenfadado. Aunque fueron relativamente rápidos en servir la comida, tardó bastante en llegar la cuenta. Se aprovechan de la ubicación para subir los precios, me parece un poco caro para lo que he probado. Lo que no me ha gustado mucho es que hay que pagar un suplemento para sentarse en la terraza…
Diego R.
Rating des Ortes: 3 València, Valencia
«A pesar de sus cosas buenas resulta caro» He de reconocer que lo primero que me atrajo de este sitio fue su nombre, pues me encantan las dos cosas(tres si incluimos el «birras» del negocio anexo). Se puede acceder al local por la parte del paseo marítimo o por la de la calle de atrás, paralela al mismo, lo cual recomiendo pues el interior es muy bonito, constando de varios ambientes entre los que está incluido el «birras&blues» que probaré en otro momento. El trato es bastante bueno, siendo el típico sitio en el que tienes un camarero«asignado» que te atiende desde que te toma nota hasta que te vas. En nuestro caso fue uno bastante simpático y vacilón, pero sin excederse. Todo correcto. Pedimos la comida y la bebida y he de decir que fueron bastante rápidos en servirla. Estaba todo bastante bueno aunque quizá no lo suficiente para hacerte olvidar y perdonar el que fue el fallo principal: el precio. Todos pedimos un solo plato e incluso uno de nosotros solo pidió postre, pues no tenía hambre. La bebida consistió en una jarra de sangría no demasiado grande y una botella de agua de medio litro(de cristal y Lanjarón, eso sí). No hubo más, ni café ni postres y la cuenta, además de que tardó en llegar, ignoro el motivo, fue más que abultada en comparación con lo que consumimos. En resumen, un sitio en un buen enclave, muy bonito por dentro, de buena calidad pero que, en mi opinión y a pesar de todo ello, resulta demasiado caro.