Bodegas Pepe Girón

Vas a una bodega que, aunque parezca una obviedad, es algo que debes tener presente si eliges ir. Pero es acogedora y la atención que prestan sus camareros bastante correcta. No puedes irte de allí sin pedir el plato estrella –no es casual que lo sea-​: carne con tomate. Deliciosa.

La considero una vez que la he probado como una gran bodega situada en el Aljarafe. Muy buena comida casera un trato por parte del personal excepcional. Calidad-​Precio corresponde. Lo recomiendo a todas aquellas personas que les guste disfrutar de una buena gastronomia.

Sin duda, una de las mejores bodegas del Aljarafe. Para nosotros es un referente que nunca falla. Acertarás si pruebas su pollo al ajillo o cualquiera de sus platos de carne. Excelentes los pimientos. De postre una tarta de canela es éxito seguro. Si no lo has hecho aún, tienes que probarla.

Me encanta este sitio desde que mis padres me llevaban de pequeña, soy muy fan de su carne con tomate. Le pongo cinco estrellas por su encanto, el apego sentimental que le tengo y por esa tapa que comento (la carne con tomate) en particular. Por lo demás, lo dejaría en alguna estrella menos.

Uno de los bares típicos del Aljarafe, situado en Bormujos. Es un local cutre si lo juzgamos con la óptica de esperarnos un restaurante al uso, pero es un local con mucho encanto, y no sé porqué, pero en invierno me resulta más encantador aún con sus braseros encendidos. Creo que los platos estrella son las chacinas en su papel (qué rica la panceta), los guisos, y casi todo lo de la carta es un acierto. Como detalle curioso, mirar los barriles firmados, o la jaula del canario con forma de carreta rociera. Además, venden un vinagre de vino por 1,50 € (creo) riquísimo que puedes llevarte a casa. Recomendable una visita sin duda.

Las Bodegas de Pepe Girón es un sitio auténtico, típico de pueblo donde encuentras a un canario cantando en su jaula, piezas de panceta colgadas de barricas de vino o poster pegados en las altas paredes de los cantaores El Mani o Juanito Valderrama. Puede que tenga un toque cutre pero su ambiente y su cocina hará que te sientas como en casa de la abuela. Te recomiendo, nada más llegar, pedir mesa al camarero de la barra, que te dará tu número. A partir de ahi, a disfrutar de sus guisos, tapas, chacinas, quesos, carnes y de su mostol, elaborado por ellos mismo y que podrás comprar in situ. Todo lo que he probado está buenísimo aunque la carne con tomate está que se sale, el pollo al ajillo, costillitas de cerdo, presa ibérica, croquetas de cocido, potaje… comida muy tradicional, esa que se pega al riñón.
Si esto era poco, te deleitarán sus postres caseros como el tiramisús, tarta de canela, pijamas, flanes con nata. Además, podrás acompañarlos con una copa de vino dulce o de naranja, que también puedes adquirir y llevartelos a casa.
Desde hace años, mantienen los mismo precios y como podrás imaginarte son muy baratos.
Hay que repetir pronto :)