Muy recomendable. Buen servicio, ambiente cuidado y comida rica. Además el precio es bastante ajustado. Además tienen una panacota riquísima
Joan P.
Rating des Ortes: 4 V
Cena de Sant Valentin Menu cerrado, muy buen ambiente Buena comida, bebida y compañía. Luego opción a gyn premium. Con barra especial. Muy buena ubicación.
Lolo R.
Rating des Ortes: 5 Madrid
Estaba así que no sabía si darle las cuatro o las cinco estrellas, porque aunque tuvieron algunos fallos, estos se fueron haciendo imperceptibles con el paso de la comida, y la verdad es que al final estuvimos fenomenal. Si bien(creo) que este restaurante lleva aquí bastante tiempo, no ha sido hasta hace bien poco que lo han remodelado, y lo han dejado precioso: cortinas para separar diferentes ambientes, mesas amplísimas, detalles de madera en el techo, y un largo etcétera de cuestiones que llaman muchísimo la atención según entras. Nos encantó. Además, tiene unos ventanales que se ven desde la carretera, que es lo que llama la atención. Esto fue lo que llevó a mi hermana a convencer a mi padre de que cambiásemos el lugar en el que tomamos siempre la paella por este. Y así, se fueron a reservar una mesa para el sábado, para que disfrutásemos de nuestro típico arroz de septiembre. Pedimos paella de marisco, y teníamos mesa para las 15 horas. Cuando llegamos, nuestra mesa estaba perfectamente montada, si bien tardaron un poco en tomarnos nota, sobre todo de la bebida. Al principio parecía que no había suficientes camareros o que no daban abasto, también es que el lugar estaba de bote en bote. Pero tras un par de toques de atención nos tomaron nota, y pedimos algunos entrantes para pasar el rato: pan con tomate, clóchinas(mejillones muy pequeños) y una ensalda de ventresca y tomate raf. El camarero nos puso sobre la mesa tres tipos diferentes de sal: con especias, con wasabi y volcánica de Hawaii para tomar junto con el pan con tomate, y la verdad es que estaban espectaculares. Las clóchinas también, y la ensalada de ventresca me sorprendió mucho: mira que es una cosa sencilla de hacer, pero llevaba el tomate cortado finísimo, casi como en carpaccio, y la verdad es que estaba muy rico. Luego llegó la paella, que comimos al centro, con bastante profusión de mariscos, y con género de buen tamaño. Nos la fuimos comiendo con la cuchara, que para eso estábamos en una mesa redonda. La verdad es que el arroz estaba en su punto y la paella muy buena, si bien al principio nos resultó algo sosa. Claro, nos habíamos puesto ciegos de sales con el tomate, pero la realidad es que la paella estaba en su punto: no quedó ni un grano de arroz. Como el postre va a un segundo estómago, dejamos sitio para él, y nos pusimos más o menos de acuerdo para pedir varias cosas y poder probar. Definitivamente: deja sitio para el postre, porque lo vas a necesitar. El tiramisú estaba rico, pero fue lo que menos me llamó la atención, fundamentalmente porque el resto de postres eran ESPECTACULARES, tanto que hacían sombra al tiramisú. La torrija de chocolate blanco es una delicia, la crema catalana en tres texturas es, simplemente, uno de los mejores postres que he probado en mi vida y –redoble de tambores– el flan de queso con helado de almendra y turrón de Jijona, una combinación simplemente genial, hasta el punto de que se convirtió en mi absoluto favorito. Por último, no te vayas sin pedir una copichuela, que las preparan muy bien: tienen una enorme cantidad de ginebras, un maestro sumiller que te dejará pasmado y sabrán aconsejarte perfectamente a la hora de combinar. Volveré seguro.
Marc d.
Rating des Ortes: 4 Valencia
El servicio es un poco lento, pero la espera vale la pena. Buena carta de arroces y vinos. Es recomendable encargar los arroces tres o cuatro horas antes de ir a comer. Paella valenciana 100% original de libro.
Alberto R.
Rating des Ortes: 3 Valencia
Restaurante en el faro de Cullera, que aúna la cocina de autor con los platos más tradicionales de la gastronomía valenciana. Igual que puedes degustar curiosas espumas y emulsiones, también puedes acabar con una típica paella de pollo y conejo encima de la mesa. Sin embargo, es en los platos más tradicionales donde falla: los arroces, sin estar malos, dejan que desear dado el nivel/aspiraciones/precio del restaurante. Y eso, estando en la costa valenciana, es un sacrilegio. Desde mi punto de vista hay demasiado interés en presentar una cocina de fusión llamativa y rompedora, donde el 80% del trabajo del chef se invierte en el emplatado. El resultado es visualmente atractivo, pero muchas veces falla el sabor o los puntos de cocción. Y la paella no perdonó. Por todo lo demás el local es muy agradable. Quizá algo masificado(hay excesivas mesas para el tamaño del local) pero es algo que solo puede llegar a incomodar en los meses de verano. La atención y el ambiente son francamente agradables.
Juan G.
Rating des Ortes: 3 V
Entre los entrantes y el segundo, hicimos la digestión. La cómoda muy bien. pero se paga. Recomendable el pulpo con jamón 3J.