El negocio familiar sigue funcionando. Este restaurante de comida valenciana es un ejemplo. Los arroces están realmente buenos, cualquiera de ellos. Si llamas para reservar tienen la paella justo para la hora acordada, por lo que puede interesar llega un poco antes para el picoteo. Esta un una zona poco transitada, por eso es conocido entre los locales y poco mas. Pero merece la pena de vez en cuando salir de las autovias y disfrutar del camino, por ejemplo haciendo un alto para una paellita o pecando en algún horno de la carretea a cullera por todos los Marenys