Descubrí este local por casualidad ya que no se encuentra ubicado en ninguna de las dos calles principales de El Perelló donde se concentran la amplia mayoria de bares y restaurantes. Durante una de las ediciones de La Ruta de la Tapa, acabamos en Ca les Trinis para probar su montadito: lomo, queso, berenjena y cebolla, una combinación ganadora! Nos gustó y decidimos darle una oportunidad para las cenas. El local es muy sencillo, bar de pueblo regentado por dos hermanas que viven en El Perelló «de tota la vida», una se encarga de la cocina y a otra de atender la mesa y debo decir que ambas son simpatiquísimas y te tratan como a uno más de la familia. Nos pedimos: — Croquetas de cocido: bueniiiiiiiisimas!!! vienen ocho en la ración, nada más verlas sabes que son caseras y cuando las pruebas ya no cabe la más mínima duda! Súper sabrosas! — Bravas: estaban buenas, no son espectaculares pero están buenas y lo interesante es que te las hacen en el momento! Nada de patatas que te piden que las salves del sufrimiento de estar todo el día metidas en el mostrador, n, no, no recién cortadas y frita especialmente para ti. — Bocadillo: mi favorito es el «Pirata» consistente en lomo, queso, patatas y huevo, un clásico, pero qué bueno! las cortadas de lomo gruesitas, como debe ser y claramente compradas en el mercado, no como las rodajas anoréxicas que venden en los supermercados. Como detalle comentaron algo que me gustó, y es que si te pides una coca cola, no te sacan los mini botellines de 200ml, si no el botellón de 350 ml, que para las calurosas noches de verano, viene fenomenal! En resumen, buen bar para ir de almuerzo o para cenar económico de picadita y bocadillos o hamburguesas y además, tienen un menú nocturno que incluye combo de picadas, bocadillo o burger, bebida y café por 10 € ¿Qué más puedes pedir? Pues las anécdotas y el buen trato que te llevas por parte del personal y eso, se agradece ;)