Vegetariano con encanto. Me gusta mucho la decoración, hace que el espacio(que no es muy amplio) se vea grande y limpio. El personal es muy amable y siempre dispuesto a dar explicaciones sobre los productos/ingredientes. La comida es muy buena, he de decir que sólo he ido en modo«tapeo». La mini-burguer me enamoró, y las croquetas brutales!
Javier J. M.
Rating des Ortes: 2 Zaragoza
Hace ya un tiempo de esta visita, pero no la guardo en el buen recuerdo, ni por la atención, que podía haber sido mucho más molona, ni por los productos que tomé. Estuvimos en barra, pero nos acercaron una carta de mesa que me resultó escasa. Y una carta escasa no tiene porqué ser sinónimo de algo malo, pero claro, si además de escasa es sosa y además de sosa y escasa es cara, pasamos de algo exquisito a una agresión gastronómica. Tendré que reconciliarme con ellos, pero como hay tiempo y opciones, será en el medio plazo.
Elena A.
Rating des Ortes: 1 Zaragoza
Tenia ganas de visitar este nuevo restaurante vegetariano. Acompañada de cuatro amigas más, en este restaurante sin quererlo sacamos nuestras dotes como críticas culinarias. La cer ds ad que el, ligar esta decorado muy bien, muy verde, muy de madera… muy moderno. La sorpresa vino cuando nos dieron la carta, y vimos la escasez de platos que tienen y sus elevados precios. Porque si los platos fueran muy elaborados y llevaran cantidad de comida, el precio seria justo, pero lo único que sobraba era plato, y escaseaba comida. Particularmente comí la lasaña ragout, que a mi parecer estaba sosa, y la elegí porque era lo que más me iba a llenar. No sabíamos se escoger platos y compartir, y así probar todo, si escoger un plato primero, un segundo y un postre cada una, o elegir un plato y compartir postre… al final fue lo que hicimos. Los postres demasiado mazacotes, un brownie seco arenoso, y una torrija q aunque parecía tortilla de patata a simple vista, estaba buena pero nada ligera, pan pan y más pan. Tales eran nuestros comentarios durante la cena, que se nos acercó el responsable del sitio para preguntarnos que era lo que no nos había gustado, para ellos tenerlo en cuenta y mejorar… fuimos sinceras a medias, nuestras criticas eran bastante duras. Volver, pues no, lo tengo muy claro, hay mejores vegetarianos en la ciudad, y al final buscamos calidad precio y cantidad. El trato del personal, por destacar algo positivo, fue excelente.
Verónica G.
Rating des Ortes: 4 Zaragoza
Aunque no soy una apasionada de los restaurantes vegetarianos, tengo que reconocer que este concepto de comida cada vez me gusta más. Pude visitarlo un día entre semana para cenar, y la verdad es que salimos bastante contentos. Había poca gente, por lo que la camarera(muy profesional por cierto) pudo dedicar bastante tiempo a explicarnos los platos y darnos sus recomendaciones. Decidimos compartir tres de ellos para probar un poco de todo. En concreto, pedimos: — Taboulet de bulgur y quinoa con recuerdos Thai. — Milanesa de berenjena macerada en leche y miso rojo, salsa suave de chipotle y emulsión de Idiazábal. — Pimiento california relleno de arroz integral, bechamel de coco y oliva verde. Todos me gustaron bastante, aunque me quedaría con los pimientos sin dudarlo. Muy buenos y crujientes. De postre, browinie de chocolate y helado de yuzu, que también me pareció que estaba bastante rico. De precio, creo recordar que nos salió a unos 20 € por persona. Con agua y una botella de vino incluida. Seguramente volveré en más ocasiones. Tengo pendiente probar sus tapas que tenían buena pinta.
Maurizio B.
Rating des Ortes: 4 Milán, Italia
sitio top… muy buen nivel de tapas y vinos, ambiente muy bien conseguido, trasmite la energía y la pasión con las cuales se ha plasmado el proyecto… para tomar tapas de calidad y cuidarse al mismo tiempo… hay zona de tapas en frente de la barra y restaurante en la zona interior. pruebas, saboreas, y repites…
Patricia S.
Rating des Ortes: 5 Zaragoza
Hacia días que quería ir, pero estaba sofocando el ansía viva para esperar a que se asentase un poquito este nuevo restaurante. Diré que lo mío con los restaurantes es un amor incondicional debido a que hace años(eones, más bien), por un problema de salud, no podía comer en otros restaurantes que no fuesen vegetarianos y salvaron mi «vida social» ya que podía seguir saliendo con los amigos a cenar por ahí. Lo primero que destaca ante todo, es la decoración… concepto«súper cuqui de nenuqui» llevado al extremo, muy bonito y creo que una de las causas de que el restaurante esté lleno de moderners(¡OMG! ¿Tantos hay en Zaragoza?). Madera, más madera y madera a saco, lo que le aporta una calidez y una paz visual al entorno, que se agradecen ya que nos libran de ambientes estridentes y estresantes de decoraciones en negros y brillos… yo me entiendo. Llegamos prontito así que tuvimos que esperar a que se abriera la cocina y mientras tomamos unas cervezas. Lo que ví en la barra me gustó. Me dejo pendiente volver de tapeo allí. Cuando entramos en la sala, nos atendió una camarera encantadora, que conforme más rato pasaba, más simpática era. Le preguntamos por sus favoritos de la carta, queríamos compartir platos para probar un poco de todo y la verdad es que, lo que elegimos entre sus recomendaciones, nos gustó bastante. Primero llegó el Taboulet de bulgur y quinoa con recuerdos Thai. Un plato ligero pero a la par, saciante con toques frescos de cítricos que personalmente, me convenció… mucho. Después, las milanesas de berenjena maceradas en leche y miso rojo, salsa suave de chipotle y emulsión de Idiazabal… A ver, un plato de berenjenas es imposible que esté malo, así que el acierto es seguro… y si, si… me gustó bastante, un toque sutil de picor, un rebozado«a la milanesa» nada grasoso… Una fuente más que generosa para una sola persona. Y para concluir los platos salados, el Pimiento California relleno de arroz integral, bechamel de coco y oliva verde… Vale que lo lees y es un poco«¿lo qué?», pero estaba muy rico. El arroz estaba crujiente, ya que después de cocido, se había tostado en el horno y junto con el pimiento rojo y la impresionante bechamel con ligeros toques ¿dulces?, daban como resultado un plato redondo. Para terminar, los postres… Yo me decanté por una copa de boniato caliente, yogur de soja, coco y pimienta de Sichuan. Veamos. El boniato me encanta, con su saborcito dulce y su textura cremosa, así que opté por este plato… el problema, desde mi punto de vista, es que el yogur se apoderaba y le daba mucha acidez al postre. Algo que me tome la libertad de comentarle a la camarera junto con la sugerencia de terminarlo con un toque de miel(¡La niña repollo cabalga de nuevo!). Fijo que volveré. Un día a probar el tapeo y los copasos que ví que estaban preparando al salir, y otro, a probar más platos. ¡Lechuga power!
César R.
Rating des Ortes: 4 Zaragoza
Que puedo decir… ya con la primera experiencia en un vegetariano se me quitó de la cabeza esa idea que antaño había(y puede que aún) de que en este tipo de sitios todo es lechuga y todo se asocia a un estilo de comida que por excesivamente sana tiene que estar exenta de sabor y magia. Falso. Conocía el lugar por haber estado en anteriores ocasiones con su antiguo nombre, el 38. El cambio es radical. El local es cuco, recuco pero cuco. La verdad la sintonía entre los elementos, colores y la iluminación es un acierto absoluto. Nada más entrar«apetece» estar. Tonos madera, colores alegres, objetos decorativos molones, sin duda fantástico. En cuanto al servicio, gente joven y con ganas. Además fueron rápidos y educados. ¿La comida?, a mi parecer muy buena. Puede que no roce la excelencia, pero las sensaciones son buenísimas. Presentación en plato fabulosa. ¿Y el precio?, unos 20e por cabeza una cena compuesta por 3 platos para compartir, vino, agua, y postre. Calidad-precio muy equilibrado. Sin duda volveré. Me faltó algo para la quinta estrella, pero lo encontraré. Recomendado.
Maño C.
Rating des Ortes: 3 Zaragoza
El tubo necesitaba un vegeta y más ahora que sabemos que la carne roja produce cancer… Han sido unos visionarios!!! El local entra por los ojos, la decoradora ha hecho un magnífico trabajo captando con la estética el rollo que venden. Tiene mil detalles molones. El concepto es muy bueno y ya sabemos que lo sano/vegetal está de moda pero a mi lo que he probado no me ha emocionado… Unas presentaciones buenísimas, tanto en literatura como en plato pero falta de sabor, de chispa, de emoción… Hablando en plata y en lenguaje maño: no es el Baobab!!! Buen servicio acorde al local: guapos, modernos y correctos. Eso sí, creo que es un local necesario, que tendrá su público, que lo han hecho muy bien y que triunfará. Yo mismo volveré.
Dani A.
Rating des Ortes: 4 Zaragoza
Una alternativa diferente en el Tubo de Zaragoza. Cocina vegetariana y vegana para todos los públicos.
Ruben V.
Rating des Ortes: 5 Sevilla
Aviso que a mi la cocina vegana, me aleja del plato más que me deleita, y no obstante lo flipé. Lo primero, por ver la posibilidad de este tipo de comida, cada vez más asentada en la hostelería española, dentro de una zona como el tubo, ya que esa oferta no existía en la zona. Por otro lado, por una decoración más que llamativa, jugando con el concepto vegetal de su nombre, con macetas por lámparas, césped en los bancos o una carta en madera Continuamos por una carta más que completa, a pesar de ser vegetariano y una más que buena selección de caldos, y como no, unas presentaciones de platos más que interesantes. La comida, lo poco que probé, ciertamente genial. En fin, que si todo va medianamente normal, debe ser uno de los restaurantes top de Zaragoza en los próximos meses.
Fernando Angel A.
Rating des Ortes: 3 Zaragoza
Bar y Restaurante Vegetariano, Vegano y ecológico… Así reza su mantra. He estado de vermut. Os cuento: La cocina es como dice su lema, nada de carne, huevos o leche en los ingredientes, sin embargo intentan hacer, entre otras cosas, tapas de apariencia normal, esto es; El pincho de tortilla no lleva huevo ni huevina ni nada parecido… lleva Harina de garbanzos! Externamente es un pincho normal y casi sabe normal, pero no,… no es lo que parece… Esta rico pero un poco seco(con cebollica hubiera estado mejor). La mini hamburguesa Vegana está bien, pero lo que sí esta rico de verdad son las tapas originales… Si tienes cocina vegana pues adelante a por ello, a sorprender!!! La croqueta de Zanahoria y Apio, un «me gusta»; Los Springs Rolls(Rollo de Primavera) otro«me gusta», La Sobrasada Vegana medio«me gusta»… No hay mucha barra y el menú en el restaurante creo que aún no lo sirven(Yo fui a las 14:00 y el Bar lleno pero el restaurante vacío) Precio… bueno. La caña a 1,50(bien!) Las croquetas y la sobrasada a 1,50. La Mini Burger y el roll a 2,50 y 2 y el Pincho a 2 €. Las tapas son de tamaño… como para repetir… vamos que si eres de buen comer te pasas la vida pidiendo… Una cosa más …ir al baño y mirar la pila o lavabo… os gustará.